Padres de familia se manifiestan contra escuela por suspensiones de clases

Se manifiestan de manera pacífica padres de familia que sus hijos estudian en la guardería preescolar divino niño del municipio de Nanchital, este derivado a la suspensión temporal de clases por los trabajos de mantenimiento del plantel. Los tutores piden un ajuste en el pago de colegiatura porque la mensualidad es de 800 pesos.

El martes por la mañana, un grupo de padres de familia, se reunió aún costado del edificio donde, supuestamente, sus hijos regresarían a estudiar luego de permanecer seis meses fuera porque estarían realizando la instalación de paneles solares y así reducir las fallas en el servicio de energía. Tiempo en el que fueron reubicados en oficinas acondicionadas en el DIF municipal.

"Somos personas adultas no chamaquitos con los que se pueden poner a jugar, en la mañana del lunes nos dicen que regresan los alumnos a su plantel y por la noche emiten un comunicado informal que anunció la suspensión de clases temporal del 25 al 31 de marzo, porque la institución aún cuenta con desperfectos", comentaron los inconformes.

Abundando, Los niños ya van en tercer grado tienen que estar listos para ingresar a la primaria, ya deben de conocer palabras, sumas, restas, y medio leer,  nosotros como padres debemos reforzar esas actividades para que nuestros hijos aprendan, pero con la suspensión de clases, no favorece mucho, al tener que hacer un pago doble por qué nuestros hijos no van a la escuela y tenemos que buscar quién cuidé de ellos mientras trabajamos 

Por otra parte, es importante mencionar de acuerdo al plan de obras la instalación de paneles solares en el CADI Divino Niño, debió ser entregada a finales del año 2024, porque su proceso inicio el pasado 26 de septiembre, a través del Fondo para la transición energética y el aprovechamiento sustentable de la energía FOTEASE, y hasta la fecha no han realizado la entrega.

Los padres de familia aseguraron que en la segunda semana de septiembre los cambiaron a las oficinas adaptadas del DIF, para que los alumnos permanecieran solo tres meses y se amplió a seis meses, por los atrasos en la obra. Quienes pagan las consecuencias de la mala planeación son los niños, porque donde están no pueden salir a jugar y tienen que convivir en espacios pequeños.

Cabe hacer mención que en el momento que los padres de familia externaron su inconformidad salió la directora del plantel, sin hacer mención del tema, pero cuando pidieron hablar con ella, los trabajores que pintaban el edificio la negaron y posteriormente dijeron que la autorización era para padres y no para medios, es decir, si estaba en el edificio, pero posiblemente dio la instrucción de negarla.