Elementos federales de la Guardia Nacional (GN) y el Instituto Nacional de Migración (INM) han sido más eficiente en las revisiones, por lo que los vehículos particulares, autobuses y camiones de carga pasan sin ningún inconveniente.
Apenas en el mes pasado, este punto de control generaba largas filas de vehículos, llegando incluso hasta el kilómetro 26, provocando molestias entre conductores y pasajeros.
La espera de hasta dos horas no solo provocaba la pérdida de tiempo y consumo de gasolina, sino también en la imposibilidad de acceder a servicios básicos, como baños o consumo de alimentos, ya que esta zona es despoblada y no hay comercios de ningún tipo.
Según versiones de hidromilos que viajan todos los días por cuestiones laborales o escolares, aseguraron que las revisiones han sido rápidas por parte de las autoridades federales.
Incluso durante las 'horas pico' de la mañana y la tarde, el tráfico fluye de manera constante, con filas de apenas 200 metros, lo que no ocasiona retrasos significativos a los automovilistas particulares.
El tráfico fluido, ocurre después de las constantes protestas en contra de las largas filas llevadas a cabo por diversas agrupaciones, entre ellas la Resistencia Ciudadana Nacional (RCN), con sede en Las Choapas.
Los viajeros que transitan por esta carretera, conocida también como la 'puerta del sureste', esperan que la fluidez del tráfico se mantenga de manera permanente, considerando las pérdidas de tiempo y económicas que anteriormente afectan principalmente al gremio del autotransporte.
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