Llamada erróneamente como la "cocaína rosa", el tussi, tusi o tusibi, es una droga sintética alucinógena que se ha popularizado en los últimos tres años en México, y cuyo consumo puede desencadenar trastornos depresivos, trastornos de ansiedad, esquizofrenia o psicosis.
El color que le dan a esta sustancia sintética, que contiene LSD, visualmente lo hace llamativo para jóvenes y adultos jóvenes de alto poder adquisitivo, ya que su costo en México y también en Veracruz, oscila en aproximadamente 2 mil pesos un gramo.
Sin embargo, quienes no tienen el poder adquisitivo, ni han visto de cerca esta droga, también han escuchado o hablado de ella, debido a que además de su color, artistas urbanos y de moda, tanto nacionales y extranjeros, han sacado canciones donde mencionan esta sustancia, música que se puede encontrar en las diferentes plataformas como YouTube y hasta en TikTok.
Influencers también han admitido consumir dicha sustancia ante sus miles de seguidores.
En la zona metropolitana de Veracruz especialistas en adicciones del sector público no reportan pacientes que consuman esta droga, aunque el tema está en conversación entre jóvenes y adultos jóvenes que ya consumen otras sustancias. Entre amigos comentan que es un polvo de cocaína mezclada con LSD, que se consume en fiestas.
“No tiene nada que ver por ejemplo con la cocaína, porque en el mundo mencionaban que puede ser como una ‘cocaína rosa’ porque su presentación es en polvo y la cocaína es en polvo, por eso puede haber la confusión, pero no.
“La cocaína es una droga de origen natural, viene de una planta con un proceso químico y entonces ya se consume y tiene efectos también estimulantes, está en especial no. Tiene más efectos alucinógenos, es considerada una droga de diseño, que no está en cualquier ámbito”, dijo Diana Loyo Rodríguez, psicóloga especialista en niños y adolescentes y especialista en adicciones.
La especialista acotó que no todas las personas consumen lo mismo y hay zonas o regiones del país en donde se presenta en mayor o menor medida el consumo de una sustancia. Subrayó que es importante saber lo que más se mueve en la zona metropolitana de Veracruz.
"A nivel zona Veracruz los casos que pueden llegar a consulta, nuestras principales drogas siguen siendo el alcohol, marihuana y cristal. Cristal ha tenido un aumento, su consumo en los últimos cinco años, un aumento importante”, puntualizó.
Explicó que todas las sustancias se clasifican en tres tipos, el tussi se han encontrado componentes alucinógenos como el LSD.
"Debemos de ver que todas las sustancias son diferentes y para nuestra facilidad clasificamos las sustancias en tres grupos, podemos encontrar: drogas que son depresoras del sistema nervioso central, drogas que son estimulantes y drogas que son alucinógenas".
Respecto al tussi comentó que se maneja en ámbitos de mayor poder adquisitivo, ya que es más costosa en comparación con el cristal, el cual su consumo ha aumentado debido a que es de fácil acceso.
"Se maneja en ámbitos a lo mejor con mayor poder adquisitivo, porque es más costoso a diferencia del cristal. El cristal lamentablemente ha sido muy barato y de muy fácil acceso. ¿Qué tienen en común estas dos drogas?, las dos tienen componentes de anfetaminas y metanfetaminas que vienen siendo estimulantes y al ser combinadas con otro, porque esa es la cuestión, las drogas de diseño no sabemos muchas veces realmente qué sustancias tienen porque están hechas de manera clandestina con medicamentos controlados (...) la cocaína rosa que es el tusibi, se han encontrado componentes alucinógenos como el LSD y entonces el uso que le dan es ese".
Las canciones donde se hace mención o referencia al polvo rosa hablan sobre fiesta o su tráfico, normalizando su consumo, pero no aborda el impacto que puede generar a la salud dicha sustancia.
La especialista en adicciones explicó que muchas de las sustancias impactan o llegan directo al sistema de recompensa del cerebro y cada una actúa de manera diferente. El sistema de recompensa en el cerebro es lo que nos hace sentir placer y es justamente una de las grandes búsquedas del ser humano.
"Estas sustancias juegan con el sistema de recompensa del cerebro y empiezan a segregar ciertas sustancias que nos dan placer que es como la dopamina, la serotonina. Estas drogas anfetaminas, metanfetaminas, tienen una manera de trabajar muy parecida a la adrenalina, entonces es un movimiento rápido, nos estimula, está en especial la de diseño, el tusibi tiene componentes alucinógenos y entonces hace que la persona tenga alucinaciones visuales, auditivas, disminuye el cansancio".
Los efectos inmediatos de estas drogas estimulantes tienen que ver con la taquicardia, la presión sanguínea, la disminución de cansancio, muchas veces también de apetito por eso también se usan mucho para los problemas de peso, de sobrepeso. Y a la larga, debido a que trabajan modificando el sistema de recompensa del cerebro, lo que ocurre es que pueden desarrollar o desencadenar trastornos depresivos, trastornos de ansiedad, esquizofrenia o psicosis, debido a que es una droga alucinógena.
"Ya hay una alteración de la percepción y es complicado que con el uso repetitivo puedan generar placer o sensaciones de placer por sí mismos", agregó.
Loyo Rodríguez subrayó que son varios factores por los que una persona consume o prueba una droga, un principal motivo, consideró, es por una poca habilidad en el manejo de las emociones, también la invitación de amigos y una comorbilidad, es decir, pacientes que consumieron porque ya había un trastorno mental presente, como depresión, ansiedad e hiperactividad, que al no ser atendida de manera apropiada u oportuna buscaron otra solución, que es el consumo de sustancias.
"Son muchos factores, podemos clasificarlos en factores individuales, familiares, el contexto, el propio tema de la adolescencia, por ejemplo. Si yo pudiera definirte algunos más en particular, en la experiencia creo que un principal motivo por el cual consume es por un déficit o una poca habilidad en el manejo de sus emociones, específicamente las emociones que son desagradables, la tristeza, el enojo, la desesperanza, entonces ante esta situación buscamos una manera artificial de ya no sentir dolor y sentirnos bien, y lamentablemente recurrimos a esta situación de consumo.
"Otro factor muy importante son las relaciones con los amigos, en la edad de la adolescencia es un factor de riesgo. Si hay un amigo dentro del grupo que consume, es muy probable que la persona si no tiene un buen criterio, si no tiene una buena toma de decisiones, sino tiene un buen manejo de emociones o en casa poca supervisión, puede probar", dijo.
Al ser una droga de difícil acceso por su costo, la especialista que trabaja en el sector público, dijo desconocer el rango de edad en que personas la están consumiendo y reiteró que es importante evitar el primer consumo.
"No hay manera de volvernos adictos, sino consumimos. Pero si empieza el consumo de alguna sustancia, podemos desarrollar una adicción, cada uno tiene factores genéticos que pueden predisponer a que desarrollemos mayor fuerza en adicción que otros", mencionó.
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