Persiste el 'trueque' de niñas por ganado en Mecayapan

Los matrimonios forzados entre menores de edad son una práctica sin acabar en Mecayapan, especialmente por el lamentable intercambio de las adolescentes por ganado, como si se tratara de mercancías, siendo el machismo y la pobreza las que obligan a recurrir a esto.

“Desafortunadamente aún siguen casos, se habla de la famosa ‘dote’, que ahí se decía que tenían, supuestamente, aprovechando esa situación, que el novio tenía que darle un recurso, presuntamente al padre, para poder mantener a su familia, mucha gente se aprovechó de eso para seguir haciendo esas prácticas”, reveló el alcalde Antonio Cervantes Vargas.

De acuerdo con el Informe anual sobre la situación de pobreza y rezago social 2022 del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), Mecayapan es un municipio con rezago social muy alto en el que habitan 17 mil 134 personas, de las cuales 16 mil 100 están en situación de pobreza.

“Se ha estado ahorita, a través del Instituto Municipal de la Mujer, tratando de ver esas situaciones, junto con el equipo que tiene están acudiendo a las comunidades a brindar capacitación para reducirlo… en coordinación con la síndica que lleva la parte de equidad de género estamos tratando de reducir esa situación que todavía se vive en la sierra”, señaló Cervantes Vargas.

Aunque no proporcionó una cifra exacta de los casos de estas prácticas, el presidente municipal reconoció que existen al menos 15 casos de violencia familiar por mes, en los que las mujeres son las principales víctimas.

En el Censo del 2020 se determinó que las mujeres son la mayor población en Mecayapan con 8 mil 906 y los hombres son sólo 8 mil 228.

“Tenemos un 22% de población analfabeta, y se va incrementando con gente que no ha terminado la primaria o que no ha concluido su nivel secundaria…uno de los principales factores es el económico, la alta marginación que se vive en la sierra de Soteapan… otro de los puntos también que está marcado es el tema del machismo. Muchas de las madres de familia adultas mayores son las que no saben leer ni escribir”, puntualizó Antonio Cervantes.