La Fiscalía General de San Luis Potosí informó que se investiga la supuesta muerte de una niña de 3 años, quien fue velada viva.
Los hechos ocurrieron en el Hospital Comunitario del municipio de Salinas la dio por muerta, en donde la menor tras presentar vómito y diarrea, la llevó a urgencias y dos horas más tarde la atendieron.
“Solo le dieron 30 gotitas de paracetamol y me dijeron que mi hija estaba bien”, comentó Mary Jane, madre de Camila.
Cuando le dijeron que había muerto le entregaron el cuerpo y un certificado de defunción en donde se estableció como causa de muerte una deshidratación severa y diarrea aguda.
Primero pensaron que se trataba de una alucinación, pues cuando Mary Jane le dijo a su familia que veía que la niña movía los ojos y respiraba no le creyeron. Pero después más personas que se acercaban al féretro se dieron cuenta que sí estaba viva.
Su abuela paterna, Felicítas Martínez, destapó la caja, le pasó por el rostro la luz de su teléfono móvil y fue el momento en el que abrió los ojos. De inmediato llamaron a la enfermera de la comunidad quien pudo constatar que la niña estaba viva y pidió una ambulancia.
La llevaron primero nuevamente al Hospital Comunitario de Salinas, ubicado a unos 40 kilómetros de la comunidad de La Herradura y de ahí la remitieron al Hospital Central en la capital de San Luis Potosí y murió en el trayecto. En el segundo certificado de defunción se informó que murió por edema cerebral, falla metabólica y deshidratación.
“Que ella murió de muerte cerebral. Duró bastantes horas ahí en la caja, pero ahí yo siento que es culpa del doctor que me la entregó hecha por muerta”, denunció la madre de Camila y exige que se haga justicia.
Se espera el resultado de la autopsia que se practicó en el Servicio Médico Legal, el cual será entregado a la Fiscalía General del Estado para integrar la carpeta de investigación que abrió de oficio por la muerte de la menor.
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