Aunque su vocación es ayudar a las personas en tránsito, la Casa Santa Ana en Boca del Río, también podría habilitarse si fuera el caso, como albergue temporal en esta temporada de lluvias, expresó el párroco Guillermo Arturo Ramírez Martínez,
Recordó que el objetivo principal de la Casa Santa Ana es atender a los migrantes que pasan y se les da de comer o alguna otra ayuda, pero más bien atienden a los indigentes que sí pasan con cierta periodicidad.
Sin embargo, ante la posibilidad de que las lluvias de la temporada afectaran a familias, la Casa Santa Ana sí las apoyaría y albergaría en forma temporal, pues su vocación es ayudar a los necesitados.
Guillermo Arturo Ramírez Martínez, párroco de la Iglesia de Santa Ana en Boca del Río y encargado de la Casa Santa Ana/ Foto: Heladio Castro.
"Claro, para eso está", afirmó de inmediato el párroco Ramírez Martínez.
Dijo que en la planta baja caben unas 350 personas, y arriba serían menos.
"Gracias a Dios no hemos tenido un evento así dramático, yo recuerdo de hace 12 años que se desbordaron los ríos, pero hoy, gracias a Dios no", subrayó.
LOS NECESITADOS
El párroco destacó que en la Casa Santa Ana se fundó en el año 2015 y entrega un promedio de 250 despensas y se da de comer a un promedio de 2 mil personas.
Resaltó que la demanda de apoyo se ha disparado por quienes han perdido todo, sin descartar al Covid como uno de los impulsores de esa difícil situación, entre muchos más.
/ct
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