El proyecto del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT) demorará de tres a cinco años para consolidarse mientras edifican los Polos de Desarrollo para el Bienestar (Podebis) necesarios, sobre todo en los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos.
Esta fue la conclusión de la Asociación Mexicana de Agentes de Carga (Amacarga), así como la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (Anierm) luego de una primera evaluación tras un recorrido de cuatro días por el sector.
Entre los descubrimientos hallaron la posibilidad de inversiones privadas y públicas para la infraestructura destinada a proyectos logísticos, respecto al ferrocarril de carga.
Por su parte, Juan Pablo Pacheco, presidente de Amacarga, declaró que, en caso de que se llegue a algún acuerdo con grupos de ejidatarios y los potenciales inversionistas, será la apertura de cero para la construcción de infraestructura pertinente que dé pie al movimiento y almacenamiento de mercancías.
“Queremos apoyar a las futuras autoridades a detectar a tiempo problemas y sus soluciones, y en ello el papel del agente de carga es clave para garantizar el buen destino de las mercancías con una vocación logística y no productiva”, enfatizó.
Debido a ello, en Salina Cruz se trabaja en infraestructura y operaciones o servicios de puerto seco, para proyectar operaciones de carga contenerizada, mientras que en Coatzacoalcos se tiene infraestructura para químicos y energéticos, pero poco movimiento de contenedores y carros de ferrocarril, “pero cuentan con experiencia y sus proyectos de infraestructura y comerciales avanzarán más rápido que en el otro extremo”.
Sin embargo, también observaron algunas correcciones que debería atender la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que están relacionadas con el tendido del cableado que va sobre la ruta, con la finalidad de evitar el riesgo de accidentes por los niveles de altura cuando inicie el servicio intermodal de doble estiba.
Asimismo, explicaron que, mediante el aeropuerto de Ixtepec, localizado en una zona militar y a 40 minutos de Salina Cruz, ya funge como un terminal civil que, si bien solo cuenta con un vuelo de Mexicana de Aviación, posee las condiciones para recibir incluso vuelos internacionales. Se tiene proyectado comenzar en 2025 la construcción de áreas de almacenamiento de carga doméstica.
El proyecto del CIIT tiene el fin de conectar los dos océanos que rodean a México desde la zona más estrecha del territorio, para funcionar como un paso de mercancías interoceánicas, pero también planea incentivar el desarrollo de los Podebis para que actúen como “imanes” para la instalación de empresas con las que se pueda impulsar el desarrollo económico de la población.
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