EN LA MIRA: Rosa María con raíces de izquierda pura

En la semana, la diputada federal, Rosa María Hernández Espejo, lanzó una sentencia directa a sus adversarios: Nos veremos en las urnas en el 2025.

En realidad, esto fue un reto de frente al panista Fernando Yunes Márquez, quien parece no estar conforme con el saqueo realizado a las arcas municipales en su administración del 2018 al 2021 y quiere más.

Así, se ha destapado con todo y sus dos denuncias penales. El Orfis por un lado, lo acusa de un desvío y daño patrimonial por más de 110 millones de pesos, y por otro, existen demandas contra su persona en las fiscalía y juzgados por el delito de falsificación de documentos.

Con toda la desfachatez del mundo, el pasado viernes en el Congreso Local, el integrante del clan Yunes, y el único que no ha sido expulsado del PAN en la entidad --pues su hermano mayor y su padre, ambos de nombre Miguel Ángel ya los corrieron de Acción Nacional- dijo que analiza la posibilidad de contender nuevamente por Veracruz.

Por eso salió al paso la morenista a quien, seguramente no lo dijo, pero le conviene ampliamente que este personaje vuelva a querer competir en el 2025 para buscar gobernar otra vez el municipio que dejó en ruinas. Competencia que los tiene muy desgastados.

Le conviene porque la gente, según lo ha dicho, ya está en el hartazgo de escuchar los mismos apellidos. Yunes y familia que han encabezado las administraciones municipales de Veracruz y Boca del Río al menos en cuatro ocasiones distintas.

En una entrevista a Rosa María, la periodista le cuestiona:

- Diputada, quisiera preguntarle, hace unos días el diputado del PAN, Fernando Yunes, dejó entrever que podría competir nuevamente por la alcaldía de Veracruz. ¿Qué opina al respecto?

Y la legisladora responde sin tapujos:

- Pues mira, la verdad que da hasta risa ese tipo de personajes. Ojalá y verdaderamente compita. Me da gusto que se estén manifestando porque el pueblo ya lo ha dicho.

El pueblo está muy manifestado que los detesta y ya el pueblo quiere un cambio. Nosotros vamos con el pueblo. Y como dice nuestra Gobernadora Rocío Nahle, al pueblo se le respeta en Veracruz y por Morena yo voy a ir. Y van a ver que nos vamos a ver en las urnas.

Auténtica izquierda

Rosa María Hernández Espejo, emana del activismo como una verdadera izquierda.

Hace casi 30 años que se encuentra en esa doctrina política. Desde 1997.

Era periodista y conductora en una radiodifusora con influencia estatal, luego subdirectora de un periódico de Xalapa, AZ Veracruz, y otros importantes medios, pero se forjó también al lado de la reconocida comunicadora, Socorro Aubry. Combativa y crítica.

En la misma línea, Hernández Espejo, pronto vio la puerta de cómo gestionar mejor y ayudar a la gente. Socorro Aubry fue diputada federal por el PRD.

Y en el trienio del panista, José Ramón Gutiérrez de Velasco, en 1998, Rosa María entró como regidora del PRD.

Tiempo después y con un fuerte activismo en la izquierda, estaría trabajando para el proyecto de Andrés Manuel López Obrador, al que se unió con todo en la operación territorial para la campaña del 2018 y donde finalmente AMLO cristalizó su aspiración y se hizo presidente de México.

Hernández Espejo de periodista y activista se sumó a la coordinación de proyectos sociales en favor de los veracruzanos, y en el 2021 ganó por amplio margen la diputación federal en Veracruz, irrumpiendo en el bastión panista en el que se había convertido la conurbación de Veracruz y Boca del Río.

Por si fuera poco, en el 2024, el 2 de junio, de nueva cuenta el pueblo le refrendó la confianza por una amplia ventaja contra su contendiente panista, en el mismo distrito, al ser reelecta en el cargo.

Pero además fue promotora del voto para la candidata al Senado en el 2018, Rocío Nahle García que también ganaría por amplio margen y por supuesto en el mismo 2024 para la gubernatura.

Rosa María es vista por analistas y al interior de su partido, como la idónea y la más avanzada dentro de la militancia para poder continuar con el destierro del PAN y los Yunes azules en Veracruz, pese a las ansias que le ganan al ex alcalde porteño, Fernando Yunes.

Hernández Espejo es además de egresada de la facultad de Ciencias de la Comunicación de la UV, doctora en ciencias jurídicas, administrativas y de la educación.

Y ha sido catedrática de la misma universidad.