Sergio Alberto Ascensión Masse se gradúa en un día de sentimientos encontrados, por un lado, la alegría de culminar su carrera en Ingeniería Petrolera, y por otro, la tristeza de no tener físicamente a su padre, Carlos Ascensión Morales, tras su fallecimiento hace unas semanas durante la explosión en Tuzandepetl.
El joven estudiante del tecnológico de Coatzacoalcos llevó el día de su graduación la fotografía de su papa, quien fue una pieza fundamental para que lograra culminar sus estudios universitarios.
Sergio no pudo tener una gran celebración a diferencia de sus demás compañeros, toda vez que su familia se quedó sin dinero tras la inesperada muerte de su papa, porque Pemex cortó el sueldo del trabajador petrolero.
Su madre Hilda Masse Zapien continua en la lucha para que pueda contar con una pensión, aun cuando ya recibió el cuerpo de su esposo.
Únicamente el ingeniero petrolero fue acompañado por su mama en la toma de foto de los recién graduados.
Como Hilda, también las otras cuatro familias de los trabajadores fallecidos en el Centro de Almacenamiento Estratégico de Crudo (CAE) que se encuentra en el municipio de Ixhuatlán del Sureste, esperan que la paraestatal que cumpla con lo que obliga la ley, como el pago de su pensión.
Hasta el momento, tres de las cinco familias de las víctimas de la explosión, no han podido darles cristiana sepultura a sus parientes, por lo que en días pasados se manifestaron en la fiscalía del municipio de Nanchital, para exigir la pronta entrega de los cuerpos.
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