La Chaya: Tesoro Culinario y Medicinal

La Chaya es una planta versátil y altamente nutritiva. Su cultivo es muy fácil, pues es una planta resistente. Su adaptabilidad en diferentes preparaciones y su potencial para la conservación, hacen de la Chaya un ingrediente valioso en la gastronomía mexicana.  

Las hojas de la planta se pueden cocinar y consumir como verdura, ya sea hervida, salteada. Se puede hacer en jugo que muchas veces se combina con piña, limón o naranja agria. Y por supuesto, se puede agregar a sopas y guisos. También se utiliza para hacer tamales, empanadas y otros platillos tradicionales. 

Es rica en vitaminas A, C y E, así como en minerales como el calcio y el hierro. También contiene antioxidantes y compuestos bioactivos que pueden tener beneficios para la salud, como por ejemplo, ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo y aliviar condiciones como la artritis y enfermedades del intestino. También puede ayudar a fortalecer los huesos y prevenir enfermedades como la osteoporosis. Ayuda al estreñimiento y a la desparasitación.  

Pero ojo, la Chaya contiene una sustancia llamada ácido cianhídrico, que puede ser tóxica si se consume en grandes cantidades o sin un adecuado procesamiento. Por esta razón, es necesario cocinarla antes de consumirla para eliminar esta sustancia y que sea segura para el consumo.  

En cuanto a su preservación, además de congelar las hojas hervidas, también se pueden envasar en salmuera o vinagre para conservarlas por más tiempo. También hay quien seca las hojas luego de cocinarlas y las tritura para obtener un polvo que se puede almacenar.  

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