México | 2024-03-04
El regreso de los ferrocarriles de pasajeros a México se concretó durante el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien impulsó el Tren Maya y el Tren Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.
Ahora que se habla de los ferrocarriles de pasajeros es inevitable recordar que su auge comenzó durante el porfiriato, por ello te presentamos cómo era el Tren del Istmo de Porfirio Díaz y cómo luce actualmente.
Y es que durante el gobierno de Díaz, que duró de 1876 a 1910, la red ferroviaria tuvo su mayor crecimiento hasta el momento, ya que pasó de tener 666 kilómetros (km) a 19 mil 528 km, aunque algunas vías fueron retiradas posteriormente.
La decisión del gobierno mexicano fue elaborar el proyecto con la condición de permitir su injerencia. La obra fue posible con la inversión de la compañía inglesa Pearson and Son, que cumplió con dicha concesión. Así, se remozaron ambos puertos para permitir la llegada de barcos de gran calado e inició lo que se esperaba fuera una época dorada.
Si bien la Revolución Mexicana tuvo cierto impacto en la zona, e incluso se formó un batallón, la decadencia del proyecto comenzó tras la inauguración del Canal de Panamá en 1914, el cual estaría totalmente controlado por el gobierno estadounidense y, por ende, todos los buques con destino a puertos estadounidenses eran enviados al canal panameño.
Ningún otro proyecto fue implementado en la zona a lo largo del siglo XX.
En un inicio el Tren del Istmo operó con 10 trenes de carga y 2 de pasajeros, que atravesaban los ríos de El Chacalapa, el Pelotal, el Sanz, el Jaltepec, el de Jumuapan, Sarabia, Mogoñe, Malatenango, Almoloyas y el Coatzacoalcos.
El tren del Istmo de Tehuantepec fue un éxito en los primeros años de operación a cargo de la empresa S. Pearson & Son Ltd. Un artículo de la revista Alquimia, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), refiere que llegó a transportar hasta 850 mil 827 toneladas de carga interoceánica.
La suerte de la ruta interoceánica cambió en 1914 cuando el primer barco transitó por el Canal de Panamá. Sumado a ello, el estallido de la Revolución Mexicana impactó en el intercambio comercial.
Durante el movimiento revolucionario la vía fue utilizada por las tropas carrancistas y para transportar el petróleo requerido por los barcos que hacían escala en Salina Cruz.
Fue hasta el sexenio de López Obrador que se puso en marcha la rehabilitación de la ruta y a un año de que termine su gobierno inauguró la Línea Z del Tren Interoceánico del Istmo de Tehuantepec que será de carga y pasajeros. Éste medio de transporte conecta los estados de Veracruz, Oaxaca, Chiapas y Tabasco.
El Tren del Istmo actualmente tiene en funcionamiento la Línea Z con 227 kilómetros de vía que van de Coatzacoalcos a Salina Cruz en 8 estaciones.
Pero también se prevé estrenar la Línea FA (328 kilómetros de recorrido) que irá de Coatzacoalcos a Palenque (Chiapas) y conectará con el Tren Maya, así como la Línea K, de Ixtepec a Ciudad Hidalgo (Chiapas).
La Línea Z tiene 8 estaciones, 6 de ellas rehabilitadas y 2 fueron construidas:
Un boleto para viajar en la ruta completa de la Línea Z del Tren del Istmo, que alcanzará una velocidad de 100 kilómetros por hora (km/h), va de los 458 pesos a los 1,554.50 pesos, dependiendo la clase en la que se viaje:
Secretaría de Marina, rehabilitará 1,197 kilómetros de vías férreas, los puertos de Salina Cruz, Coatzacoalcos, Dos Bocas y Puerto Chiapas, así somo se prevén 12 polos de Desarrollo para el Bienestar en los estados de Veracruz, Oaxaca y Chiapas.