Israel | 2023-12-04
Luego de finalizar la tregua entre Israel y Hamás, regresaron los bombardeos.
Las autoridades sanitarias en la Franja de Gaza dieron a conocer que habían fallecido 184 personas y cientos más habían resultado heridas por ataques aéreos que impactaron en unas 20 viviendas.
Israel y Hamás se acusaron mutuamente de no haber cumplido con las negociaciones y desencadenar la reanudación de la violencia.
Por otro lado, la Casa Blanca señaló al grupo militante palestino y apuntó que no había presentado una nueva lista de rehenes que liberar para permitir una prórroga de la tregua.
En lo que respecta a Israel, acusaron a Hamás de lanzar un misil.
Catar, quien ha desempeñado un papel importante en los esfuerzos de mediación, señaló que las negociaciones con los israelíes y palestinos seguían en curso para el restablecimiento de la tregua.
No obstante, el país manifestó que este nuevo ataque complicó sus esfuerzos.
Hamás afirmó que había atacado la ciudad de Tel Aviv, pero no se dieron detalles sobre el número de víctimas ni los daños en la ciudad.
Para la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el reinicio de la pugna agravará la crisis humanitaria.
"El infierno en la Tierra ha vuelto a Gaza", expresó Jens Laerke, portavoz de la oficina humanitaria de la ONU en Ginebra.
Asimismo, testigos aseguraron que los bombardeos fueron más intensos en las ciudades de Khan Yunis y Rafá, localizadas al sur de la Franja de Gaza.
En esas regiones, cientos de miles de gazatíes están refugiados de los combates más al norte. También fueron alcanzadas viviendas en las zonas del centro y del norte.
Israel por otro lado, tras el ataque de Hamás lanzó folletos para los civiles, como lo ha hecho desde que inició el asedio el 7 de octubre pasado.
Los planfetos ordenaban a los residentes de cuatro pueblos su evacuación, al sur a Rafá, en la frontera con Egipto.
"Tienen que evacuar inmediatamente e ir a los refugios de la zona de Rafá. Khan Yunis es una zona de combate peligrosa. Están advertidos", decían dichos panfletos.