Ciudad de México | 2024-11-12
Científicos de la NASA y de la Universidad de Warwick ya han pactado la fecha estimativa en la que explotará el sol, en un proceso que culminará con su transformación en una enana blanca.
Este ciclo de vida, común en estrellas de su tamaño, traerá consigo una serie de etapas dramáticas en las que la Tierra y el resto del sistema solar serán profundamente afectados, hasta perder las condiciones de habitabilidad tal como las conocemos.
Según la NASA, la explosión del sol tendrá lugar dentro de aproximadamente 5.000 millones de años. Cuando el Sol consuma todo el hidrógeno en su núcleo, comenzará un ciclo de transformación que lo llevará a expandirse y convertirse en una gigante roja.
Esta fase es decisiva y marcará el inicio de su final. El agotamiento del hidrógeno, que es el combustible principal de sus reacciones nucleares, provocará que el Sol comience a fusionar helio. Como consecuencia, el Sol crecerá en tamaño de forma considerable, irradiando una cantidad extrema de energía.
Durante su expansión, el Sol absorberá los planetas más cercanos, como Mercurio y Venus, y la Tierra enfrentará condiciones de radiación y calor extremo. Esto llevará a la evaporación de los océanos y a la pérdida de la atmósfera, dejando el planeta completamente inhóspito para cualquier tipo de vida.
Este estado transitorio de la gigante roja no será permanente; eventualmente, el Sol colapsará, quedando reducido a una enana blanca. En este estado final, el Sol habrá perdido la mayoría de su masa y será incapaz de sostener la vida en los planetas restantes del sistema solar.
Al contrario de las supernovas, que son explosiones estelares catastróficas, el proceso de muerte del Sol será más lento y predecible. Los científicos han explicado que el Sol se apagará gradualmente. Esto deja un margen teórico para que la humanidad busque alternativas de supervivencia.
Sin embargo, los expertos también advierten que incluso mucho antes de que el Sol colapse en una enana blanca, la creciente luminosidad solar y el cambio climático podrían hacer que la Tierra sea inhabitable en tan solo 1.000 millones de años.
Así, a medida que el Sol agote sus recursos, la radiación que emite será tan intensa que afectará profundamente la atmósfera de la Tierra. La erosión atmosférica y la desaparición de los océanos pondrán en peligro la vida tal como se conoce hoy, acelerando el proceso de extinción.
Para los expertos, el futuro de la humanidad podría depender de la exploración espacial. En teoría, Marte podría convertirse en un lugar más habitable antes de que el Sol llegue a su fase final, siempre y cuando los avances tecnológicos permitan el establecimiento de colonias humanas autosuficientes en el planeta rojo u otros sistemas solares.