México | 2024-05-16
El Covid-19 fue el acontecimiento que de dejó en vilo a todo el mundo en el año 2022, extendiéndose las medidas de seguridad para hacer frente al virus incluso en los años siguientes. No obstante, hoy en día la enfermedad ha disminuido enormemente el número de cuadros graves, por lo que, contrario a lo que se piensa, no se debe bajar la guardia, dado a que cada poco tiempo aparecen nuevas cepas del Sars-CoV-2. De manera que esta enfermedad vuelve a ser tendencia por la nueva variante conocida como FLiRT.
En semanas recientes los Centros de Control de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han detallado sobre un nuevo conjunto de variantes; las cuales se han detectado en la vigilancia de aguas residuales, y amenazan con ocasionar una nueva ola de infecciones por Covid-19. En concreto, durante el 14 y el 27 de abril, la variante FLiRT ha representado el 24.9 por ciento de los casos en EU. Debido a esto, se ha convertido en la cepa dominante en la región, sobrepasando la JN.1, que actualmente se encuentra en el 22 por ciento.
Los expertos han apuntado a que la nueva cepa contiene características que son de consideración, siendo una de ellas los cambios en la proteína de la espícula, la cual juega un papel importante en el modo en el que el Covid-19 coloniza el cuerpo y enferma a las personas.
A esto se suma que cada vez son menos las personas que se ponen al día con su esquema de vacunación contra este virus. Tan solo en EU, la tasa de actualización de la vacuna de Covid-19 es bastante baja, pues se encuentra en torno al 22 por ciento, lo cual causa un incremento en los casos.
Cabe destacar también que, la presencia de nuevas variantes no quiere reduce la eficacia de las vacunas existentes, que han demostrado ser certeras contra diversas variantes del virus. Aunque es probable que las vacunas no sean tan eficaces contra algunas variantes como lo son contra el virus original, no obstante, la mayoría de la población vacunada que se contagia de una variante experimenta síntomas más leves que quienes no están vacunados.
En lo que respecta a los síntomas, los registrados hasta el momento son similares a los de otras variantes, según con los Centros de Control de Enfermedades (CDC). Entre ellos, se incluyen fiebre, tos, congestión, secreción nasal, dolor de garganta, dolor muscular, de cabeza, escalofríos, problemas respiratorios, fatiga, pérdidas de olfato o gusto, 'niebla mental' (sentirse menos despierto o consciente) y síntomas gastrointestinales.
Distinguir los síntomas de la nueva variante puede ser un desafío, puesto que sus signos son similares a los de otras variantes o, incluso, a las infecciones previas. No obstante, es importante observar los nuevos casos y cómo evolucionan, poniendo especial atención a regiones como Estados Unidos, los cuales cuentan con mayor prevalencia de esta cepa.