Sin patear el pesebre

Sin patear el pesebre

Coatzacoalcos | 2024-07-04

No cabe duda que la   mejor cirugía plástica y la más  segura y económica es cultivar la autoestima y la seguridad personales.  Qué relación tiene una cosa con la otra?, mucha.  Veamos,  vivimos en una sociedad en que los individuos tienden a dejarse llevar por parámetros externos para sentirse bien o para recibir una buena imagen del espejo social,  es decir lo que los otros parientes, conocidos y amigos piensan o dicen con respecto a lo que debemos hacer.   Por  ejemplo, para las personas de físico esbelto  o agraciada todo va bien,  en cambio para alguien obeso o que físicamente no cumple con los cánones de belleza establecidos <generalmente y desgraciadamente> es excluido, marginado de numerosas actividades y hasta de cargos o  jefaturas, por el simple hecho de no ser un buen modelo. 

Todos sabemos que en muchos países existe una gran cantidad de personas con trastornos de alimentación, como; anorexia  bulimia y obesidad mórbida. Tampoco ignoramos que en ciertas épocas del año, los gimnasios se llenan de hombres y mujeres que francamente sienten que necesitan cambiar físicamente para ser aceptado por los demás,  o simplemente para ver qué son capaces de participar en actividades cómo nadar, o tomar el sol en traje de baño. 

Pero vivir pendientes  de lo que nos aprueba los demás sin que medien  análisis personales o reflexiones acerca de los contenidos mismos, es  injusto y discriminatorio.  Quienes viven así, se convierten  en una suerte de esclavos de los gustos ajenos,  sus mentes están ocupadas solo en esto, la estética por sobre las capacidades,  la gente que vive así, se  engaña,  las cientos de horas usadas no para conservar la salud, si no como imposición de la moda, o los miles de pesos que gastan mujeres hombres y ahora hasta jovencitas, para modificar su apariencia física,  ponen en tela de duda, el vedadero significado y el sentido de la vida.   Apuestan al  mundo de la fantasía y colocan  sus expectativas humanas y de raciocinio en quimeras pasajeras. 

Con suerte quizás esos cambios artificiales,  inducidos por los demás solo duren algún  tiempo, mientras duran los efectos.   Pero en realidad  estos cambios foráneos por sí solos no logran darnos definitivamente la tan ansiada seguridad personal y autoestima que necesitamos.  Al  final tarde o temprano el cuerpo retoma su desarrollo natural y todos vamos a envejecer corporalmente, porque no tomarlo con dignidad?. 

Realmente lo que debe prevalecer por sobre cualquier condición,   es la amistad, esta debe de estar por sobre cualquier canon, y  prevalecer por sobre cualquier posición política, la amistad está por  sobre cualquier posición económica, sobre  cualquier credo, o manera de pensar. 

La  vida finalmente termina y  nada no llevamos , todo se queda.  Lo único que dejamos en los demás,  son las buenas Memorias. Nada de lo que pueda hacer el ser humano para cambiar su físico, podrá  inferir o modificar el carácter, sus comportamientos y la empatia con sus iguales.

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