Naturaleza y los pajapeños Quinta parte

Vivencias de Puerto México; Naturaleza y los pajapeños Quinta parte

Coatzacoalcos | 2024-02-19

En esta edición dominical, continuaré narrando mis vivencias en la entonces naciente Colonia Puerto México; lugar en donde me tocó iniciar una nueva vida familiar, compaginada con mis actividades en el taller de carpintería familiar, el cual continuó operando en el barrio de Las escolleras del actualmente sufrido, puerto de Coatzacoalcos, Veracruz. 

En ese tiempo, año 1963 de once años de edad, que yo y mi familia, llegamos a la colonia Puerto México (la colonia).

Recuerdo que previamente a nuestra residencia, durante la construcción de los muros de nuestra casa, por el maestro albañil de nombre Urbano; regularmente acudía a pie desde las Escolleras del río, hasta el lugar de la construcción para ayudar y vigilar el desarrollo de la construcción, actualmente ubicada en la esquina de Díaz Mirón y Carlos Gómez a un lado de la actual Preparatoria Luis Echeverría de la Colonia Petrolera; en ese tiempo era la última casa en construcción que se ubicada en la colonia.

Recuerdo que el panorama del entorno estaba formado por pequeñas dunas con abundante pasto y otros arbustos, arbolitos de guayaba y otras plantas de agradable aspecto cimarrón, y en las partes bajas había pequeñas lagunas que en conjunto constituían un ecosistema en donde la majestuosidad de la naturaleza aún ofrecía sus dotes mágicas, INEXISTENTE hoy día.

Ambiente en donde el espectador humano podía concebir la agradable humedad del lugar; el aspecto virgen de la vegetación; escuchar el chirriar o canto y ver volar las aves; observar las manadas de borregos y chivos, pastando por doquier; ver correr los conejos y cangrejos: azules, peludos o rojos.

El ver pasar o comprar los artículos frescos que ofrecían los indígenas provenientes de la sierra, conocidos como Los Pajapeños, quienes en realidad eran personas provenientes de todas las poblaciones de la sierra del San Martin y Santa Marta, quienes montados en caballos o burros, diariamente recorrían la costa del Golfo sureño veracruzano, ofreciendo sus productos desde que llegaban a la Colonia, que consistían en pequeños cerdos, pollos, gallinas, patos, pavos, pavitas, huevos, pescados, ostiones en concha, frutas y verduras diversas. Actualmente esos productos los expenden afuera del mercado Morelos...

"Mira profundamente en la naturaleza y entonces comprenderás todo mejor". (Albert Einstein)

Continuará.

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