Coatzacoalcos | 2024-03-13
Este martes los admiradores del Ska Veracruzano despertaron con una impactante noticia: El vocalista de Los Aguas Aguas fue expulsado del grupo tras acusaciones de presunta violencia y misoginia en uno de los tendederos colocados en Xalapa durante las marchas del #8M.
Lo anterior demuestra que ni el medio del espectáculo está exento de la violencia de género, pues la violencia hacia las mujeres no respeta condiciones sociales, edades, ni contextos, tal como ocurrió con Los Aguas Aguas, banda con 20 años de trayectoria.
Hablar de Los Aguas Aguas es también hablar de una banda cuyo compromiso social es el de también difundir el ejercicio de una sexualidad responsable, sin embargo, los señalamientos contra su vocalista son de antaño, esto de acuerdo con los comentarios publicados en las cuentas de Instagram de Tendedero Xalapa y Colectiva Medusa.
En la publicación, las agrupaciones feministas cuestionan a Los Aguas Aguas silenciarán lo ocurrido, incluso revelan que en otra conocida agrupación uno de sus integrantes es un presunto violentador: Los Sonex, agrupación también de Xalapa.
Ya sea por presión social, por obligación o responsabilidad, Los Aguas Aguas tuvieron una decisión difícil, la de tener que expulsar a su vocalista Demiss C. A. R., pues argumentaron que es necesario mantener los mensajes de paz y respeto plasmado en sus canciones.
No creo que sea ni el primer ni el único caso de misoginia y violencia de género que exista dentro del gremio musical veracruzano, se habla muchos más, entre ellos casos del sur de Veracruz.
Es tan complejo poner en tela de juicio la veracidad o falsedad de una denuncia de una víctima de violencia de género, pues se juegan fibras muy sensibles por las que tendríamos que vivirlas en carne propia, ya que muchos cuestionan el porqué una denuncia pública y no una por la vía penal, o el porqué se alza la voz tardíamente como ocurrió con Sasha Sökol a raíz de la entrevista en la que fue revictimizada cuando el productor Luis De Llano admitió con el periodista Yordi Rosado, la relación que tuvo con la Extimbiriche.
El caso de Sasha Sökol marcó un precedente histórico, pues con ello levantó la voz sobre lo normalizada que está la pederastia, la violencia sexual y la misoginia en el ambiente artístico nacional.
Lo ocurrido con Los Aguas Aguas desvela que tampoco la provincia se salva de la violencia contra las mujeres en el ámbito artístico.
En días pasados me tocó entrevistar a la saxofonista Karol Mariño, quien me expresaba lo complicado que ha sido abrirse en un ambiente en su mayoría de hombres, pues se tiene la penosa creencia de que ´son fáciles´.
"Todavía hay mucha discriminación y todavía ese machismo de que las mujeres no podemos destacar en un mundo de hombres... desgraciadamente por estar en este ámbito principalmente te sexualizan, te sexualizan por tocar un instrumento, por cantar, o piensan que tu vida es, pues, una vida más fácil porque estás en este mundo.
"Es un ambiente muy pesado, que los grupos musicales, que las orquestas como lo vemos están rodeado de hombres, entonces el ver que una mujer sobresalga en la música o que sea talentosa, también es símbolo de que no sabe, de que no está preparada como un hombre al tocar un instrumento", externó la joven músico.
Aunque sé de nombres, no me consta ni puedo exponer, pero en el sur de Veracruz y en Coatzacoalcos particularmente, la farándula no se salva de señalamientos por violencia a mujeres, acoso y hostigamiento: músicos de bandas y solistas de diversos géneros, incluso creadores de contenido que se hacen llamar influencers, hasta periodistas y un largo etcétera.
Sé de casos de maltrato de primera mano, pero son casos de resiliencia de mujeres que pertenecen al ámbito musical que han hecho lo que corresponde conforme a la ley; sé de quienes no han denunciado porque es un proceso que requiere de mucho valor, sé incluso situaciones del ámbito político y gubernamental que no se salvan de la violencia, del machismo, de la misoginia y del adulterio, pero no me corresponde dar nombres, ni señalar, ni criticar, ni revictimizar, sólo decirles que entiendo su dolor y que todo es a tiempo, ni antes, ni después, ni por presión social.
Así es la misoginia en la Farándula Estatal.
#NiUnaMás
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El anuncio de la salida del vocalista de Los Aguas Aguas.
CORTESÍA