Las ventas se desplomaron desde mediados del mes de agosto y tras dos meses no se han recuperado, coincidieron comerciantes ubicados en distintos puntos del centro de la ciudad, lo que demuestra que muchas familias no se han recuperado económicamente de los gastos del retorno a clases.
Walter Manuel Montero Félix, quien ha sido tablajero por más de treinta años, comenta que en lo que respecta a su negocio las ventas han disminuido en un 40 a un 50 por ciento, lo que impacta considerablemente.
Explicó que como los ingresos solo dan para reinvertir y cubrir necesidades básicas de su familia, tiene paralizados algunos proyectos como mejorar el equipo del negocio, realizar trabajos de mantenimiento o poder expandirse.
La misma situación padecen comerciantes de otros giros, como las novedades, quienes consideraban que con las festividades de la independencia en septiembre o de la revolución en noviembre, podrían incrementar sus ingresos.
Los vendedores de comida preparada también han sentido la disminución de clientes, en el pasillo superior del mercado Benito Juárez, una tercera parte de las fondas han cerrado sus puertas de manera definitiva.
La esperanza de los comerciantes está puesta en el mes de diciembre y la navidad, cuando hay bonanza económica por los aguinaldos y otras prestaciones; aunque se prevé que las familias procuren ahorrar para los primeros meses del siguiente año que se vislumbra incierto.
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