Por cada niño que trae al mundo, afirma doña Tomasita, su cuerpo recibe juventud y niñez, de ahí que a sus 77 años de edad más de 50 como partera, asegure tener fuerzas y lucidez para seguir atendiendo partos en su domicilio particular, donde tiene materialmente un consultorio.
Doña Maria Tomasa Centeno González recibió este viernes, en el marco del día de la partera tradicional que se celebró el 5 de mayo pasado, un reconocimiento por sus enseñanzas a otras parteras y por su labor de más de medio siglo como tal. 53 años, aclara al reportero, doña Tomi, como también le dicen.
El reconocimiento fue dado por el sector salud a través de la jurisdicción sanitaria numero X con sede en San Andrés Tuxtla, que a su vez convocó a otras parteras de la región para recibir instrucciones y un curso por parte de Francisca Xolio Acua, encargada de parteras y auxiliares de salud de dicha autoridad jurisdiccional.
Maria Tomasa es hija de otra partera, María Tomasa González Pérez, quien fue empírica, y de su padre Juan Centeno Moreno, que fue agente sanitario durante 50 años en el desaparecido hospital regional civil General Miguel Alemán González de Acayucan, mismo que ahora opera en Oluta.
Estudio enfermería en una universidad de Tuxtla Gutiérrez Chiapas y al culminar sus estudios, trabajó durante diez años en el hospital de Acayucan, donde realizó diversos oficios y aprendió a atender las labores de parto. “Había que hacerle de todo, afanadora, enfermedad, partera, de todo” dice en la plática que tuvo con Imagen del Golfo.
Pese a que su madre fue partera, ella no heredó de ésta sus enseñanzas si no del trabajo que realizó en el hospital, cargo que dejó una vez que, a sus 38 años de edad, naciera su único hijo, el licenciado en educación física, Roberto Serrano Centeno.
Dijo que había pedido a Dios le diera la oportunidad de ser madre, pues tenía dificultades para embarazarse y luego de lograrlo, decidió retirarse del trabajo en el hospital.
Desde que trabajaba en el hospital a la fecha, dice, es buscada como partera, labor que se incrementó durante los últimos dos años pues la pandemia del coronavirus complicó a las mujeres poder aliviarse en el hospital o en las clínicas particulares, pues eran rechazadas por el riesgo de estar contagiadas se coronavirus.
Sostuvo que a la fecha son 2500 mujeres a las que ha ayudado a tener sus hijos, en ocasiones han sido gemelos, comenta.
Pese a sus 53 años de labor, así como su edad que es de 77 años, dice tener fuerzas para seguir recibiendo a más seres humanos a la vida. Espera aumentar su récord de atención de mujeres y es que “cada niño que recibo, me inyectan juventud y niñez”, afirma.
Doña Tomasa tiene su consultorio en la calle Porfirio Diaz esquina Gutiérrez Zamora en Acayucan.
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