En medio de condiciones climáticas adversas, los pescadores de El Muelle lanzaron sus redes en algunas partes del río Tonalá, evitando así enfrentarse a las inclemencias del mar.
A pesar del ingreso del Norte que trajo consigo fuertes vientos durante este sábado, los hombres de mar optaron por no cambiar sus rutas habituales, encontrando refugio en la zona de La Panga Vieja.
En esta área, los pescadores se dedicaron a la captura de chucumite, guabina y robalo, especies que no solo aseguran la alimentación de sus familias sino que representan ingresos adicionales durante estos días cuando las condiciones climáticas impiden que ingresen a las aguas del Golfo de México.
Ante la necesidad de obtener ingresos económicos, los pescadores destacaron que es importante continuar con sus labores a pesar de las condiciones climáticas que los ponen en riesgo de un naufragio.
El solo hecho de no trabajar un día representa en no tener ingresos para cubrir las necesidades básicas de su familia, por lo que buscan otros sitios para lanzar sus redes y navegar cuando las condiciones climáticas lo permitan.
Hasta la tarde de ayer sábado, varias embarcaciones menores zarparon con pescadores a bordo, quienes, buscan el sustento diario.
En promedio podrían ser una docena de pescadores quienes salen a realizar las artes de pesca, aunque aseguran extremar precauciones en medio del mal tiempo, debido que las embarcaciones no cuentan con sistemas de georeferencias.
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