Devastada se encuentra la zona de playa del municipio de Agua Dulce, a consecuencia de fenómenos naturales que impactaron en la costa con toda su fuerza.
Los eventos del Norte incrementaron la marea que arrastró a los inmuebles de al menos seis restaurantes, dejando bajo la arena las grandes estructuras de concreto que eran parte de los centros turísticos.
La fuerza de las aguas del Golfo de México, removió desde su base una estructura de más de cuatro metros de altura, además que los pozos artesianos quedaron a la intemperie, al azolvar una importante cantidad de arena.
En la zona destruida, se observa decenas de costales con tierra con la cual los propietarios trataron de apuntalar su estructura, sin embargo, sucumbieron con la fuerza del agua que entro hasta el área de cocina.
Los prestadores de servicio consideraron que es casi imposible volver a reconstruir sus inmuebles debido a la costosa inversión sin la garantía que permanecerán en buenas condiciones ante los embates de otros frentes fríos.
Ahora la zona devastada también es considerada como centro turístico para los visitantes, debido que se asombran en las condiciones en las que se encuentran algunos restaurantes que apenas a mediados del año pasado pudieron visitar cuando ofrecían los diversos servicios.
Los prestadores de servicios esperan que las condiciones mejoren y puedan acondicionar sus locales antes del periodo vacacional para poder obtener ingresos que contribuyan a medio reparar sus instalaciones.
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