Regional
Muere perrito en Las Choapas tras ser cruelmente capado
Otro caso más de crueldad animal, ocurrió en el municipio Choapense, donde un perro murió luego que una persona le amputara su aparato reproductor.
Se trata de un canino callejero de 5 años y de nombre Negro, quien se refugiaba en la calle 16 de Septiembre de la colonia Barrio de Tepito, hasta donde el pasado domingo llegó para pedir ayuda, pero a pesar de los esfuerzos que realizaron vecinos y la organización Bi’Cu Protección Animal, no pudieron salvarle la vida.
Según versiones de los testigos, presumen que el animal fue atacado por una persona enferma de sus facultades mentales o adicta algún estupefaciente, debido que no entiende porque con tanta brutalidad, le cortaron el pene desde los testículos.
Al parecer el ataque pudo ser hecho como un acto de entretenimiento, pero los vecinos coinciden que fue atroz, con un cuchillo cortar parte del cuerpo del animal, que en caso de salvarse, no tendría una vida digna, por lo que el único camino era su sacrificio.
EMITEN ALERTA
Los mismos vecinos de este sector, emitieron un alerta, debido que en este sector vive una persona ‘desquiciada’ que le genera placer causar daños a los animales, por lo que más adelante podría atacar a un niño o a una persona de la tercera edad.
Por esa razón consideraron que las autoridades policiacas deben reforzar la seguridad debido que varias calles no tienen luz, además que pidieron a las autoridades de la Fiscalía General del Estado, inicien las primeras investigaciones por la brutalidad con la que se atacó a El Negro.
SUMAN VARIOS CASOS
El ataque a El Negro, no es primer caso de crueldad animal ocurrido en Las Choapas, aseguró Nayelli Guevara, luchadora de los derechos de los animales y quien sostiene un refugio para perros sin apoyos del gobierno, solo con las donaciones de los ciudadanos y sus recursos propios.
En esta ciudad, se reporta de manera constante la muerte de animales incluso a balazos y arma blanca, con la cual perforaran los pulmones o hasta los queman, como fue el caso de la perrita Maya.
En todos estos casos, ninguno de los responsables han sido sancionados, razón por la cual éste tipo de abusos siguen ocurriendo con total impunidad, demostrando una sociedad insensible por el cuidado o la vida de los animales.
