La casa del migrante, Guillermo Ranzahuer que se ubica en Oluta, ha convocado a una marcha denominado “todos somos migrantes, no me llames extranjero”, a fin de dar a conocer la actividad que hace ese albergue pero también, en rechazo y combate al racismo, la xenofobia, la homofobia, la discriminación que sufren y que cada vez más va en aumento.
“Eso es lo que queremos, que se escuche, que se sepa, que no todo el migrante tiene que ser rechazado, el migrante es un ser como usted, como yo, y somos seres humanos que tiene los mismos derechos que nosotros los mexicanos, excepto al voto” dijo María del Rocío Hernández Lucho, directora de la casa del migrante.
En entrevista dio a conocer que la marcha será el lunes 22 de abril, a partir de las 10 de la mañana, en Villa Oluta, desde el acceso a la cabecera, hacia el centro, donde habrá de concentrarse la población participante.
Aunque se ha avanzado mucho en cuanto a la contratación laboral de migrantes que llegan al país, teniendo una profesión adquirida en su país; en México hay quien abusa de su necesidad de trabajo.
Existe dijo María del Rocio Hernández, empleadores que están conscientes y ofrecen trabajos dignos y pagados en forma justa, pero hay quienes, se aprovechan y quieren pagarles muy por debajo del salario mínimo vigente por un día de labor.
“Por el simple hecho de ser extranjero o extranjera, quieren pagarles cien pesos” afirmó.
Dijo que todos aquellos empleadores pueden acudir con seguridad a la casa del migrante ubicado en la calle Ignacio Allende del barrio Cuarto de Oluta, y solicitar empleados y ser enlaces para poder apoyar a ambas partes.
“En ningún momento se le viene a quitar el trabajo a los mexicanos, Dios da para todos y muchas veces en las redes se difunden, que el extranjero viene a quitarle el trabajo a los mexicanos, en ningún momento vienen ellos a ocupar un lugar de los mexicanos” expuso.
La población que atiende la casa del migrante Guillermo Ranzahuer es variable, aunque, dijo su directora María del Rocío Hernández Lucho, se apoya a todos los que están en su proceso de buscar ser refugiado.
“No hay sobre cupo, igual y tenemos un limite de atención debido a nuestra capacidad, nuestra capacidad es para atender a 220 personas pero atendemos en un promedio, muy cómodo para que también nosotros poder atenderlos” dijo.
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