Un grupo de aproximadamente quince migrantes, todos de origen venezolano, varios de ellos niños, fueron engañados por personal del Instituto Nacional de Migración (INM), que prometió apoyarlos con un traslado en autobús y llevarlos desde la Ventosa, Oaxaca hasta Acapulco, Guerrero, pero fueron abandonados en Villahermosa, Tabasco.
Como pudieron, hombres y mujeres fueron buscando alternativas de poder llegar hasta Acayucan, tratando de poder ingresar al albergue para migrantes, Monseñor Guillermo Ranzahuer, que está en Oluta, pero al saber que ahí, iban a quedar encerrados, decidieron caminar hasta Sayula de Alemán, en dirección a Campo Nuevo, para intentar subir a la estación ferroviaria del tren en Medias Aguas.
Este grupo de personas era parte de una caravana de migrantes, que avanza poco a poco desde Centroamérica hasta el centro del país, pero que el jueves, fue interceptado por el Instituto nacional de migración en la Ventosa, Oaxaca, para invitarlos a tomar autobuses de la misma dependencia, a fin de que no se pongan en peligro.
Varios de los integrantes de ese grupo, aceptaron el apoyo pero lejos de ser llevados hacia el centro de la república mexicana, fueron abandonados en Villahermosa Tabasco.
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