Lorenza Jiménez Luna, este año tiene la representación de María, madre de Jesús, en el viacrucis viviente que se desarrolla en el municipio de Nanchital, el apoyo y respaldo de sus compañeros le permite fortalecer su fe en Cristo. Fue un milagro de vida quien reforzó su Fe.
Lorenza Jiménez, a sus 48 años de edad, se preparó espiritual y físicamente, para sentir el dolor, angustia, fortaleza, que vivió la Virgen María madre de Jesús, al ver a su hijo padecer crucificado en la cruz, fue flagelado, humillado por los sumos sacerdotes y los soldados romanos, durante la procesión a distancia sufre por el trato que dan a su hijo.
"En mi familia tuvimos un caso especial que nos fortaleció la fe, a una sobrina le diagnosticaron cáncer en fase terminal, esa noticia removió sentimientos en todos los que rodeamos a mi familiar nos unimos en oración toda la familia, luego de recibir el tratamiento los médicos el cáncer desapareció, y ellos mismos calificaron el resultado como un milagro, hoy representar a la Madre de Jesús, ha permitido adentrarme más en las Sagradas escrituras", comentó Lorenza.
Agregado la entrevistada, hace dos años que llegue a Nanchital y preservó mi fe en la iglesia católica, me preguntaron si aceptaba el representar a la madre de Jesús en el viacrucis, no dude en aceptar, sé que es un papel importante, que permite adentrarnos para fortalecer la Fe y acercarnos más a Dios.
"Hago el llamado a los jóvenes para que se acerquen a Dios, es tiempo de perdonar, reflexionar, y se logra conociendo las sagradas escrituras, es la guía de la vida que todos debemos seguir", concluyó Lorenza..
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