En pésimas condiciones se encuentran los 17 kilómetros de la carretera Cuichapa-La Concepción, una ruta indispensable para los habitantes de la congregación y diversos ejidos en el municipio de Minatitlán.
Los deslaves, hoyancos y desniveles han convertido esta vía en un riesgo latente, ya son 'trampas mortales' capaces de provocar accidentes automovilísticos y con resultados funestas.
A pesar de la gravedad de la situación, las autoridades encargadas de la rehabilitación han permanecido indiferentes, generando molestia entre la población que refiere que cualquier accidente será responsabilidad del gobierno de Minatitlán.
Rigoberto Soto Toto, habitante de la zona, lamentó la falta de respuesta a las gestiones realizadas ante diversas autoridades y aseveró que:
“Tenemos tramos desde Pelizola hasta Diaz Ordaz, que son rutas vitales para más de 50 ejidos, estas no han recibido trabajos de mantenimiento, con eso se demuestra que la población de los ejidos permanecen en el abandono”.
Las condiciones deplorables de estas arterias no solo obstaculizan el libre tránsito, sino que también impactan en el sector comercial al dificultar el transporte de mercancías, afectando así a las familias dedicadas a la venta de diversos productos.
Si de por sí estas condiciones son alarmantes, la situación empeora para los enfermos, ya que los caminos intransitables impiden el acceso de ambulancias o unidades de rescate.
Por esa razón las personas heridas o enfermas que requieran revisión médica, tienen que ser cargados y soportar hasta cinco horas de camino para poder salir de la comunidad, resultando en trágicas consecuencias que podrían evitarse.
Ante esta difícil situación, las autoridades locales han mostrado indiferencia de los pobladores, quienes se encuentran molestos por esta situación, por lo que no descartan protestar frente al palacio municipal para que sean escuchados.
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