Este dos 2 de noviembre, el Cementerio Municipal, el más antiguo de la ciudad con más de cincuenta años de historia, recibió a centenares de personas que acudieron a rendir homenaje a sus seres queridos fallecidos.
Las familias acudieron a limpiar y adornar las tumbas, preservando así el recuerdo de sus familiares fallecidos, colocando también en las tumbas alimentos y bebidas que les gustaban a los difuntos, siguiendo estas tradiciones que van d generación en generación.
El ambiente se apoderó del aroma de velas de cebo, flores y copal, elementos que caracterizan a las ofrendas tradicionales y que no dejan que muera.
A pesar de la considerable asistencia en los cuatro panteones en la ciudad, el número de personas no alcanzó los niveles de años anteriores, cuando los pasillos del cementerio se veían saturados.
Las autoridades, a cargo de la seguridad, la corporación policiaca y de Protección Civil, informaron que durante los dos días de celebración no se registraron incidentes que lamentar, por lo que cerraron la jornada con ´saldo blanco´.
MIGUEL A. RODRÍGUEZ/IMAGEN DEL GOLFO
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