Tres años han transcurrido desde que fuera tomada en cuenta la molestia de los derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Nanchital en donde reciben un pésimo servicio, en la clínica 66.
El gobierno en turno anunció que, gestionado ante el IMSS a nivel federal, la ampliación de la Unidad Médica Móvil número 66.
Además, que iniciaron los trámites para la donación de un terreno adecuado para la reubicación y construcción de la nueva UMF. Esta contará con un área de urgencias, con el fin de mejorar el servicio para la ciudadanía.
Este proyecto fue iniciado en 2020 por exalcaldesa Zoila Balderas Guzmán, sin embargo, hasta concluir su administración, para lo que transcurrieron dos años, no hubo respuesta favorable, quedando la acción en trámites y visitas de autoridades que verificaron las carencias de la clínica.
Dicho proyecto se ejecutaría en los terrenos de la API Nanchital, en el que caminaron representantes del IMSS.
Ahora luego del anuncio hecho por la autoridad en turno, los nanchitecos esperan que este se haga realidad, ya que a la fecha las quejas por el mal servicio no paran, lo cual representa poner en riesgo la integridad física de alguna persona que requiere de atención médica.
Los trabajadores esperan que el descuento que se les realiza finalmente se haga valer, teniendo el servicio de médicos de guardia, medicamentos y que el personal cumpla con los horarios correspondientes.
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