Se apagó la esperanza de encontrar con vida al trabajador Gabriel Obed Canseco Pacheco, sus mismos familiares anunciaron por Facebook, que él falleció en la explosión del Centro de Almacenamiento Estratégico de Tuzandépentl en Ixhuatlán del Sureste.
A pesar que aún no encuentran su cuerpo lo siguen buscando en la ‘zona cero’ del estallido entre los restos, de cenizas, tubos y vehículos carbonizados que sucumbieron ante el fuego y la radiación térmica.
Desde la noche del sábado, se realizaron los dos primeros rezos y el domingo en la eucaristía de las 11:00 horas en la parroquia de Nuestra Señora del Carmen, en donde se realizó la intención por la muerte del obrero.
A pesar que Pemex hasta la noche de ayer no había informado de manera oficial la muerte de Gabriel Obed, sus familiares lo corroboraron, convirtiéndose en el primer hidrómilo fallecido durante la contingencia del jueves.
La casa ubicada en la calle Juventino Rosas a un costado de la cocina Juanita, han llegado familiares y amigos del trabajador de Pemex acaecido el pasado jueves durante la jornada laboral.
Todos, rodeados en torno de una mesa, entre las oraciones para que su cuerpo sea encontrado, también se narran los recuerdos y anécdotas de Gabriel, a quien recuerdan como un hombre trabajador, sincero, generoso y amoroso con su familia.
Ahora solo tienen que esperar, para poder traer sus restos y darle cristiana sepultura, mientras tanto, seguirán como desde el día jueves, ‘esperando’ y con mucha incertidumbre.
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