En medio de gritos de “reelección, reelección y te amamos AMLO” por parte de cientos de ciudadanos emocionados por la reactivación del tren de pasajeros 107 años después de que salieron de circulación; el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, cortó el listón inaugural de la estación de Medias Aguas, Sayula de Alemán, que entró en funciones como una de las estaciones del Tren Interoceánico.
A su arribo, a tierra veracruzana procedente de Salina Cruz, Oaxaca, descendió del tren que recorrerá a partir de este 22 de diciembre el tramo Coatzacoalcos - Salina Cruz, de la línea Z que ofrece carga de mercancía y transporte de pasajeros.
López Obrador, acompañado del Gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, el Gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, del empresario Carlos Slim Helú, presidente de grupo Carso, y los Secretarios de la Sedena, de la Secretaría de Marina, entre otros, cortaron el listo de en esta estación representativa.
En un breve mensaje, López Obrador, se dirigió a los habitantes de la región que se dieron cita para ser parte de este momento histórico dentro de la reactivación del tren para pasajeros, señaló “este proyecto ayudará a reactivar la economía de la región y de todos los puntos que serán las estaciones dentro del tramo que conectará el océano con el Pacífico”.
Tras el corte de listón, los tripulantes ascendieron al tren de nuevo y continuaron su recorrido con rumbo a Coatzacoalcos, en donde este sábado 23 de diciembre será inaugurado el tramo Coatzacoalcos, Veracruz - Teapa, Tabasco, para conectar con el tren maya.
“Yo soy maderista, sufragio efectivo, no reelección. Estamos tranquilos de haber formado las bases para continuar la transformación” contestó el ejecutivo federal a cientos de ciudadanos que le gritaron ¡reelección!
Con la reactivación este viernes 22 de diciembre de la línea Z del tren de pasajeros del corredor Interoceánico, sería importante la rehabilitación y rescate de la estación ferroviaria de Ojapa, opinó el historiador de Oluta, Rafael Penagos Millán.
En su cuenta de Facebook, el egresado de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, señaló que la estación no ha sido contemplada por el momento, sin embargo, reactivarla, sería de beneficio comercial para municipios como Oluta, Acayucan, Texistepec, entre otros.
“Actualmente deberia existir un proyecto de rehabilitación y rescate del sitio, y la construcción de una nueva estación de pasajeros —conservando la antigua como histórica— esto debido al proyecto de reapertura del Tren Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, mismo que contempla la reactivación del servicio de transporte de pasajeros que conectara comercialmente a los puertos de Coatzacoalcos, Veracruz, con el de Salina Cruz, Oaxaca. Sin embargo, dentro de este proyecto, no esta contemplada (por el momento) la reapertura y rehabilitacion de la estacion Ojapa, la cual vendria a beneficiar mucho a los habitantes de ese punto geográfico del sureste, ya que se podría recuperar la movilidad social con el ir y venir de los pasajeros, y reactivar la dinámica comercial en el sitio, dándole mayor impulso y desarrollo económico local a las poblaciones de Oluta, Acayucan y Texistepec, que se encuentran actualmente en manos de la inseguridad y la delincuencia”, escribió en una reseña.
Este viernes, en Medias Aguas, Sayula de Alemán, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador cortó el listón de la estación como uno de los puntos para abordar el tren de pasajeros del Corredor Interoceánico que une a los puertos de Salina Cruz, Oaxaca y Coatzacoalcos.
Ojapa viene del vocablo náhuatl «Oxapan» que significa “río del ojito”, posiblemente en alusión al camino o sendero por donde se trasladaban los indígenas en la época prehispánica hacia el río Chiquito (tributario del Coatzacoalcos). La ranchería de Ojapa —perteneciente al municipio de Oluta, Veracruz— cobra importancia una vez que el 15 de diciembre de 1894 se apertura en ese sitio la estación del tren de pasajeros del Ferrocarril Nacional de Tehuantepec que comunicaba y enlazaba a las poblaciones de Oluta y Acayucan con el resto de la República Mexicana.
La estación es de estilo victoriano-inglés, construida durante la época del Porfiriato por la empresa inglesa Pearson & Son Limited, a la cual se le concesiono el proyecto de la construcción de toda la vía ferroviaria y sus estaciones a lo largo y ancho del Istmo de Tehuantepec.
Durante la lucha armada de la Revolución Mexicana, la estación de Ojapa fue testigo de diversos combates, es por ahí donde ingreso el ejército constitucionalista o carrancista a apaciguar y controlar la guerra de guerrillas en el cantón de Acayucan, y es en ese mismo sitio, donde los rebeldes felicistas comandados por Cástulo Pérez y Enrique Díaz, atacaban a mano armada y con caballería, los trenes militares carrancistas para hacerse de pertrechos y capturar rehenes, y así debilitar las operaciones de las tropas del ejército en los ramales del ferrocarril en la región que eran comandadas o dirigidas por Jesús Carranza —hermano del entonces Presidente Venustiano Carranza—.
De esta manera, la estación de Ojapa fue testigo de ataques a fuego cruzado entre estas dos facciones políticas, como la ocurrida aquel 7 de junio de 1919 donde los rebeldes combatieron por más de 5 horas contra los carrancistas hasta tomar la estación, viviéndose imaginariamente en ese sitio, un escenario similar al de las películas del lejano oeste.
En la década de 1930, debido a la circulación de información, comunicación y demanda de pasajeros que se trasladaban por esa pequeña estación de tren, fue que el Departamento de Aeronáutica Civil Mexicana decide abrir en ese sitio, una pista aérea por donde aterrizaban aeroplanos, aviones militares y avionetas privadas donde se transportaban las cartas y el periódico, siendo considerada «La Estación de Ojapa» como el primer aeropuerto que hubo en el sur de Veracruz, años antes de que se abriera el aeropuerto viejo de Minatitlán y el nuevo de Canticas.
Fue por esta estación, donde se le daba la bienvenida y despedida a familiares, donde llegaban viajeros, extranjeros, personalidades, andaban comerciantes, vendedores, operadores «trabajadores-maquinistas» y la exportación e importación de productos de toda clase, así como la circulación de diarios, cartas, escritos, y todo tipo de informes a traves del telégrafo que comunicaba a la ciudad de Acayucan por el camino carretero vecinal de 8 km de longitud, este tendido telegrafico hacia su paso previamente por el pueblo de Oluta y despues se convirtio en la primer linea telefónica que hubo en la región. Asimismo, este camino carretero por donde diariamente se trasladaban muchas personas, dio origen años despues a la Sociedad Cooperativa de Autotransporte de Pasaje y Carga Acayucan-Ojapa, S.C.I. que a la fecha aún opera con el servicio de autobuses urbanos en la región.
La estación de Ojapa, también vio pasar y llegar a grandes personalidades, politicos y dignatarios, como el paso de Porfirio Díaz en 1907 para dirigirse a inaugurar el recinto portuario de Puerto México «Hoy Coatzacoalcos», o como la llegada del tren presidencial durante la visita a Oluta y Acayucan del entonces Presidente de la Republica Miguel Alemán Valdés en 1952, o bien, con la visita del ex Presidente Adolfo López Mateos para supervisar la ayuda humanitaria en la zona debido a las afectaciones que causo el sismo del 26 de agosto de 1959.
Con la apertura de las carreteras federales que hicieron su entronque directamente en la ciudad de Acayucan a partir de 1952, y con la llegada de las empresas de autobuses de pasajeros, la gente paulatinamente dejo de hacer uso del ferrocarril como medio de transporte. De manera que el tren de pasajeros que pertenecía al Ferrocarril Nacional de Tehuantepec, dejo de operar «oficialmente» el 31 de diciembre de 1998 después de estar en funciones a lo largo de 104 años.
El gobierno del expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León en 1995 le concesiono la vía ferroviaria del Istmo —únicamente para el servicio de carga de mercancía— a la empresa Ferrosur, convirtiendo a la antigua estación de Ojapa «por más de 25 años» en una bodega para maquinaria y fierros viejos, dejando el sitio en completo abandono, a pesar de que se corría el rumor de que la empresa Ferrosur le había donado la antigua estación al H. Ayuntamiento de Oluta para su rescate, conservación y mantenimiento. Lo único cierto, es que el inmueble está protegido y considerado como monumento histórico por la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos del INAH”.
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