La anarquía en el transporte público, genera condiciones de riesgo para centenares de usuarios, debido que en el servicio de taxi, circulan unidades sin póliza de seguro y los choferes con licencia de conducir vencidas.
Al mantenerse suspendido los operativos de revisión de documentos por parte de Transporte Público, provocó que los ‘ruleteros’ ya no renovaran sus permisos.
La tolerancia de las autoridades, ha permitido que circulen en la ciudad taxis piratas, incluso con números repetidos o clonados, lo que permite que se puedan cometer algún tipo de infracción o delito al interior de la unidad sin que puedan ser localizables.
Algunos taxistas, refieren que no han renovado su licencia, debido que por la pandemia del coronavirus, sus ganancias son pocas, al igual que el propietario de la unidad, asegura que no cuenta con el capital para cubrir el seguro de cobertura amplia.
Los usuarios han señalado, que a todo eso, se tiene que agregar que algunos taxis se encuentran en pésimo estado, que van desde sillones rotos y hasta choferes que manejan al mismo tiempo que contestan llamadas telefónicas.
Los taxistas infraccionados reconocieron que atraviesan por una crisis económica, por lo que esperan regularizarse para cumplir con el reglamento de vialidad.
Mientras tanto, seguirán siendo los usuarios los más afectados por la anarquía que impera en el sector del transporte público, principalmente en su modalidad de taxi.
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