A doña Apolonia Cruz Gutiérrez, el programa federal Sembrando Vida, le cambio materialmente la vida al grado de que hoy en día, vive solamente con productos orgánicos y de la venta de los mismos.
De trabajar su parcela junto con su esposo para medio sobrevivir, ahora, ella y su pareja, han logrado sacar adelante a dos hijos que ya son ingenieros y dedicarse totalmente a la alimentación orgánica, con base a un proyecto que se inició primero, con el programa sembrando vida y luego, durante la pandemia, emprender una siembra de hortalizas que ha sido un éxito.
Ella vino desde el ejido Los Mangos, en el municipio de Hueyapan de Ocampo a Acayucan para dar testimonio de su labor en el campo, en el evento donde fue presentado el proyecto Huerta en tu casa.
Ahí ella afirmó que gracias al proyecto agroalimentario ahora no solo vende plantas del programa sembrando vida, si no también verduras, lixiviados, composta y otros productos para que otras familias puedan seguir su ejemplo y materialmente vivir de lo que producen.
Expuso que durante la pandemia, inició el proyecto de sembrar huerta en casa, y de eso, ha surgido cosechas de cilantro, tomate, epazote que en la misma comunidad de Los Mangos, venden y obtienen un ingreso extra al apoyo gubernamental.
Además de verduras, dijo, tienen una plantación de tres hectáreas de naranja y otras de plátano que ahora está cosechando, por lo que, materialmente, expuso, tienda una vida totalmente orgánica.
“Ya vivo especialmente de productos orgánicos porque ya químicos ya no ocupo casi, porque estoy dejando de contaminar el ambiente, si hago todo eso es para vivir una calidad mejor, menos enfermedad, menos diabetes, menos hipertensión, porque comer tanto producto contaminado, eso nos está llevando a la muerte” comenta en una plática con Imagen del golfo.
Ella da gracias al programa gubernamental, pero también a su dedicación al trabajo, misma que con gusto comparte a quien desea aprender a realizar huertos en sus casas, con la creación de composta y otros ingredientes necesarios para tener una vida sana.
Platicó que, aun cuando sus hijos ya son ingenieros, los dos siguen ayudándola en sus labores dentro del huerto, pues será una actividad que nunca dejarán de hacer.
“Del campo salieron para ser ingenieros y gracias a todos los programas de gobierno que nos han estado dando y saber trabajar los programas de gobierno uno sale adelante, pero si uno no lo trabaja, uno nunca sale adelante, queda uno en lo mismo, con eso programa de sembrando vida he sobresalido y sigo sobresaliendo hacia adelante” expuso doña Apolonia, de 47 años de edad y con solo primaria como escolaridad máxima.
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