Abogados de Agua Dulce, sin interés por cargos en el Poder Judicial

A pocos días de que se abra oficialmente el registro de aspirantes para los 850 cargos judiciales que se elegirán en la votación extraordinaria del próximo 1 de junio de 2025, ninguna abogada o abogado de Agua Dulce ha manifestado interés en postularse como juez o magistrado de distrito.

Este proceso, que por primera vez permitirá que los jueces y magistrados sean elegidos por voto directo de la ciudadanía, es uno de los cambios más significativos que trajo la reforma al Poder Judicial impulsada por el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador y recientemente declarada constitucional por el Congreso.

Según las reglas emitidas por la cámara alta, el registro de aspirantes a jueces y magistrados de distrito iniciará el próximo 24 de noviembre. Sin embargo, en Agua Dulce hasta ahora no hay colegas interesados en inscribirse.

NOVEDOSO

"Es un proceso novedoso y positivo, pero también muy exigente en cuanto a requisitos y expectativas", comentaron algunos abogados consultados, quienes atribuyen la falta de interés a las estrictas condiciones para ser aspirante, que incluyen un título profesional en Derecho, un promedio mínimo de 8 durante la licenciatura, cinco años de experiencia profesional y cartas de recomendación.

El desinterés de los abogados hidrómilos, podría deberse también a que el proceso de elección por voto popular en un ámbito tan técnico como el judicial plantea dudas sobre la adecuación de los criterios de selección. "No es lo mismo elegir a un representante legislativo que a un juez; se teme que este cambio lleve a un sistema donde los méritos profesionales pierdan peso frente a las campañas públicas", volvieron a coincidir

COMPLEJIDAD

Por su parte, Elisa Colmenares, abogada y miembro influyente del mismo Colegio, coincidió en que la complejidad de las demandas podría desalentar a los abogados locales, y resaltó que aún existen muchas preguntas en la comunidad jurídica sobre la implementación de la reforma y los retos que implica.

"El cambio es significativo, pero necesitamos más claridad sobre el proceso y, especialmente, sobre cómo la sociedad verá y valorará el papel de los jueces y magistrados. Los abogados deben sentirse respaldados tanto en lo técnico como en lo ético al postularse", puntualizó Colmenares.