‘Ya se los cargó la…’ Así fue el asalto a un autobús en Ixtaczoquitlán

“Los asaltantes aprovechan las paradas que hacen los conductores sobre la autopista (Orizaba-Córdoba), salen de entre los matorrales, se suben y asaltan a todos sin que nadie se dé cuenta, incluso los choferes ya hasta saben y se van a vuelta de rueda, no quisiera pensar que están en complicidad porque actúan como si nada hubiera pasado”, informó una mujer que fue víctima de un asalto a un autobús de la línea Plateados durante la mañana del miércoles 8 de junio.

Los trabajadores de Orizaba y la región centro, usuarios de esta línea, solicitaron a las autoridades poner mayor atención, y que investiguen para evitar que continúen estos asaltos, ya que además de perder sus pertenencias también deben hacer trámites para obtener sus identificaciones.

"Cuando yo me subí como a eso de las 07:15 horas el autobús ya venía podría decirse lleno, cuando llegamos a Ciencias Químicas el autobús ya sé lleno completamente, muchos ya iban parados y amontonados en el pasillo y para colmo ayer no hubo operativo

“Algo curioso es que ese mismo chofer la semana pasada no permitió que los policías se subieran a revisar el autobús, y en la curva ya saliendo de Escamela vuelve a hacer parada y se suben dos hombres y una mujer, y esos se quedaron hasta adelante porque obviamente ya no había espacio".

La mujer detalló que al llegar a la capilla de la localidad Potrerillo Pueblo de Ixtaczoquitlán el camión volvió a hacer una parada, y ahí fue donde un hombre con chamarra roja y con gorra salió de entre los matorrales; "sale, llevaba una gorra pero debajo un pasamontañas gris, el cual se termina de poner… recuerdo que iba corriendo y se iba poniendo el pasamontañas y se sube al autobús y empieza con groserías a decirnos que nos iba a cargar la no sé qué y saca un arma y encañona al chófer e inicia el atraco”.

“Esas personas que se subieron en la curva también se suman al robo. Un chavo de los asaltantes empieza a avanzar solicitando nuestras pertenencias, como yo vi que mi amigo reaccionó sacó su cartera y empezó a guardar su dinero y sus credenciales yo traté de hacer lo mismo, pero ya no me dio tiempo y terminé entregando mi celular. El primer chavo nada más recogía las cosas y se iba, no nos ofendió ni nada, pero el chavo de la chamarra roja nos gritaba y nos amenazaba, incluso a una chava que trabaja en el seguro le pegaron".

Relató que en una segunda vuelta los asaltantes exigían que entregara más cosas, pero dijo que ya había dado lo que llevaba, mientras que a otra trabajadora la golpearon debido a que no entregaba los aretes.

"Hija de tu p… madre, entrega todo o aquí te carga la no sé qué, y le dije ya no tengo nada que entregarte y todavía yo abrí mi mochila y le enseñe que lo único que llevaba era mi desayuno y hasta abajo llevaba mis identificaciones y la credencial, la tarjeta del banco y una USB que ocupó en la oficina. Enfrente de la puerta iba una chava y a ella sí le dijo hija de tu no sé qué, quítate los aretes y obviamente con el miedo no se podía quitar tan rápido y a ella le pegaron".

Puntualizó que antes de llegar a la localidad Sumidero, los presuntos asaltantes gritaron al conductor que los bajara.

Aseguró que en todo el transcurso el chofer nunca aceleró, siempre se mantuvo a vuelta de rueda; "fue súper despacio todo ese tiempo, entonces ya los bajó en Sumidero pero los brazos no les alcanzaban con todas las bolsas y mochilas".

Enfatizó que el autobús continuó su marcha hasta llegar a la caseta de peaje 045 de Fortín de las Flores, en donde los pasajeros se bajaron y solicitaron el apoyo de los paramédicos, porque aparte de la señora que habían golpeado venía otro señor que igual trabaja en Córdoba y otra señora mal; “quiero pensar que era diabética e hipertensa porque se le puso mal en el camino, se bajó ahí, estaba parada una grúa que transporta los carros de Capufe, vomitó al señor y con la misma se volvió a subir al autobús".

Afirmó que el operador les dijo que las autoridades ahí presentes; Fuerza Civil y Policía Estatal, no les iban a ayudar, y les pidió que abordaran y se sentarán para continuar el camino.

"Cerró la puerta, avanzó y siguió haciendo sus paradas normales y ya llegué a mi trabajo; lo más chistoso es que el conductor siempre se portó de manera burlona, yo lo sentí como que se estaba burlando, incluso él siguió su rutina como si no hubiera pasado absolutamente nada".

Tras este lamentable hecho, la joven pidió a las autoridades ponerse a trabajar y frenen estos atracos.

"Exigimos mayor seguridad, que supriman las paradas hasta Sumidero o la caseta saliendo de Ciencias Químicas, que pongan una barra para identificar metales, un botón de pánico pudiera ser una opción, como Monitor Orizaba.

“Les pedimos que pongan más empeño en su trabajo porque creo que nosotros como ciudadanos lo que nos descuentan es para pagar la seguridad del ciudadano y creo que no están haciendo bien su trabajo".