Familiares de Fabián Díaz Méndez, acribillado por policías en presencia de su hija de 13 años de edad, en las inmediaciones de la congregación Donato Guerra, pidieron justicia por su muerte. Sin razón alguna fue asesinado. Además exigieron la intervención de las autoridades municipales y estatales para que las niñas no queden en el desamparo.
"Llegó la Policía y lo empezó a corretear y le empezó a disparar. No hubo ningún motivo porque no hizo nada. Él estaba tranquilo acá en la casa, cuando de momento empezaron a llegar las patrullas de la Estatal cuando estábamos acá platicando. Entonces lo único que hizo mi hermano fue correr y las patrullas lo empezaron a balacear sin motivo. Incluso su niña (Maritza) lo iba siguiendo y cuando empezaron a dispararle por poco le dan en la cabeza a la niña. Ahí fue cuando mi hermano empezó a gritar por su hija, porque yo creo pensaba le había pasado algo a su hija", relató su hermana Fabiola Díaz Méndez.
Manifestó que cuando ellos intentaron pasar a verlo, los policías estatales se lo impidieron. Incluso les preguntaron a los oficiales si su familiar estaba herido para que mandarán a traer a la Cruz Roja y les dijeron que el hombre se encontraba bien, pero que estaba tirado en el piso porqué estaba ebrio.
"La niña (Maritza de 13 años) iba siguiendo: le gritaba: papá papá... Cuando empezaron a disparar por poco le dan en la cabeza a mi sobrina. Ahí fue cuando empezó a gritar mi hermano que se fuera para allá. Entonces el cayó y nosotros quisiéramos pasar a verlo, pero ya no nos dejaron. Les comenté que si estaba herido que nos dijeran por favor para que mandará a traer a una ambulancia y dijeron 'no, su hermano está bien. Lo único es que está tirado, como andaba un poquito tomado, lo único que está haciendo su hermano es que está tomado y está tirado".
Su hermana dijo que en todo momento los policías estatales negaron que su hermano ya estuviera muerto, aunque posteriormente les dijeron que ya venía una ambulancia, pero que no les podían decir nada, aun cuando su padre gritaba por ver a su hijo.
Su madre Magdalena Méndez de La Luz, de 73 años de edad, quien se encuentra enferma pidió ayuda por las dos niñas: Maritza y Alexa, de 13 y 10, años respectivamente, ya que han quedado huérfanas, pues su padre era quien cuidaba de ellas, como de su propia madre.
"Las niñas dependían de su papá y la verdad ahorita lo único que pedimos es que la apoyen ahorita, que le den una pensión para las niñas. Las niñas son dos y se quedaron desamparadas".
Así mismo dijó que no solicitarán justicia ya que para accesar a la justicia se necesita dinero y ellos apenas van a poder cubrir los gastos funerarios, por lo que le dejan la justicia en las manos de Dios.
"Fíjese usted que para eso (justicia) se necesita dinero y pues francamente la verdad no hay dinero... Si apenas íbamos a cubrir los gastos y ya para así para meterse en problemas. Ya ve que es puro dinero y la verdad regalado nunca nos hacen el favor... Siempre puro dinero. La verdad no nos comprometemos. Ahí se lo dejamos a Dios. Él va a ser la justicia, porque en esta vida todo lo que se hace, en esta vida se paga".
Finalmente dijo que el cuerpo lo van a velar durante dos noches: miércoles y jueves en su domicilio asentado sobre la calle Los Almendros de la congregación Donato Guerra, de Huiloapan, justo a un costado del Parque Industrial Valle de Orizaba y posteriormente será enterrado en el Panteón de la Congregación Donato Guerra.
Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto | Aviso de Privacidad
Reservados todos los derechos 2024 |