El rescate de la estación de ferrocarril más grande de Oaxaca, ubicada en Matias Romero, ha concluido por parte de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) como parte de su programa de rescate y mejoramiento de espacios urbanos emprendida en el Istmo de Tehuantepec dentro del proyecto de desarrollo del Corredor Interoceánico.
De acuerdo con la Secretaría Técnica del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), el proyecto ha sido concluido y se espera en breve su entrega a Ferrocarriles del Istmo de Tehuantepec (FIT) para su uso y aprovechamiento, aunque actualmente ya opera como estación de arribo y descarga de pasajeros de la línea Z.
El programa se tuvo de parte de SEDATU y del FIT, una intervención de terreno de mil 557 metros cuadrados en un área de construcción de 2 mil 645 metros cuadrados.
En esta estación se localizará el centro único de mando y control para las líneas Z, K y FA. También se contará con un edificio administrativo, talleres, almacenes, alojamientos, medicina de transporte, helipuerto, zona comercial, escuela de capacitación y equipamientos; programa arquitectónico de rescate de la vieja estación, consta de una estación de transporte la cual se conforma de una taquilla, tienda y oficina de operación y administrativa. En el primer nivel, habrá un museo donde se realizará una exposición permanente, así como algunas temporales, mientras que en el nivel 2, en el Centro de Desarrollo Comunitario se instalará una sala de proyecciones y un área de lectura y trabajo comunal.
El Centro de mando y control ferroviario de Matías Romero conectará los estados de Veracruz, Oaxaca, Chiapas y Tabasco, uniendo tres líneas ferroviarias y los cuatro estados.
Esta estación de trenes, fue inaugurada en 1907 con el nombre de Estación Rincón Antonio y fue construido por la empresa Pearson & Son Limited que comenzó el proyecto en las últimas décadas del siglo XIX
Fue construida en un estilo arquitectónico llamado neo-tudor y fue hecha de una estructura de acero, pisos de concreto, paredes de ladrillo y detalles de madera en su interior.
Además de utilizarla como estación de tren y gracias a su gran tamaño, también era utilizada como oficinas generales de los ferrocarriles nacionales de Tehuantepec, oficinas de súper intendencia de tráfico, despachadores, restaurante, sanitarios y habitaciones para huéspedes.
La estación ferrocarrilera de Matías Romero por su antigüedad permite establecer y considerarla como monumento histórico por lo que fue importante su actual restauración por parte de Sedatu.
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