Películas de Marvel regresan a China tras ser vetadas en 2019

Después de casi cuatro años de ausencia, las películas de Marvel regresarán a los cines en China, anunció el miércoles el estudio estadounidense, lo que provocó la felicidad de muchos en país asiático.

Esta prohibición ha estado presente desde julio de 2019, y ha supuesto una gran cantidad de pérdidas millonarias en la compañía de Walt Disney, ya que no ha podido estrenar ninguna de sus producciones de los últimos tres años en el mayor mercado cinematográfico del mundo.

Con la esperanza de obtener una autorización en el inmenso mercado chino, los estudios de Asia, toman a veces la decisión de cortar ciertas escenas consideradas como demasiado violentas, demasiado osadas, perturbadoras o bien juzgadas como políticamente sensibles por el poder.

Marvel Estudios, propiedad de Disney, anunció el martes el lanzamiento en China de Black Panther: Wakanda Forever, el 7 de febrero y el 17 del mismo mes, también estrenarán Ant-Man y la Avispa. El levantamiento el mes pasado de la mayor parte de las restricciones sanitarias en China marca un retorno gradual a la normalidad en el país.

Gracias al levantamiento del veto, Disney puede estar tranquilo de poder volver a entrar en el mercado cinematográfico que más dinero genera del mundo.

¿Por qué las películas de Marvel se prohibieron en China?

Las razones de este veto de China a las películas de Marvel no están del todo claras. Una de ellas podría ser la censura que sufren las producciones que desean integrarse en el mercado del país asiático.

 Muchas películas extranjeras suelen enfrentarse con obstáculos si deciden representar en sus historias ciertos aspectos relacionados con la Comunidad LGTBIQ. En el caso de Marvel, los breves momentos donde se menciona la homosexualidad de algún personaje.

Otra de las razones podría ser las críticas que la directora de Eternals, Chloé Zhao, ha realizado sobre la política de su país de origen, China. Zhao ha sido duramente criticada en su nación debido a su clara oposición al gobierno de Xi Jinping. La creciente tensión geopolítica entre Estados Unidos y China también ha provocado que ambos países protagonicen diversos boicots a varios productos producidos por la nación rival.