En medio de un proceso penal que enfrenta por el delito de fraude fiscal e incluso con una orden de aprehensión en su contra, el empresario Miguel Alemán Magnani ha contratado un despacho de abogados para quedarse los derechos y consecuentes regalías de la marca “Luis Miguel”.
Tal disputa la lleva, no con el cantante, sino con su hermano, el también empresario Alejandro Gallego Basteri.
De acuerdo con dos solicitudes de Oposición ingresadas al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) en 2018 hay al menos 10 marcas que el hermano del artista quiso registrar y que infieren la intención de arrogarse para sí el derecho de explotar comercialmente el nombre de Luis Miguel, lo mismo que sus apelativos y frases asociadas al contenido de la famosa teleserie que se transmitió por la plataforma Netflix.
Así, mientras Alemán Magnani hace frente al proceso penal por el fraude fiscal derivado de su empresa de aviones Interjet, al mismo tiempo intenta quedarse con los derechos sobre el nombre del cantante y frases que ha dicho.
Dentro de esta batalla legal también pretende quedarse con el derecho de frases como “LMSOLE MIO”, “REY LUISITO”, “Micky”, “Te odio Luisito Rey”, “Luis Miguel Gallego”, “Luis Miguel Brand”, “Luis Miguel el Rey de México” y “Culpable o no”, algunas de las cuales surgieron como tendencia en redes sociales tras la difusión de la serie biográfica de Luis Miguel en Netflix, a partir de abril de 2018 y que lleva tres temporadas.
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