Raso y Colocado

"Si quieres conocer a una persona dale poder", reza un conocido refrán que encaja a la perfección en la entrenadora, Iliana Núñez Alcudia, quien desde que asumió el mando de la gimnasia en Veracruz ha perdido el piso y se la pasa cometiendo error tras error y ganándose enemigos de a gratis.

De aquella entrenadora humilde y amigable que conocimos hoy no queda nada, pues tal parece el poder ha mareado a la dirigente, a tal grado de darle la espalda a las que en su momento la apoyaron para llegar a la silla de la AVG.

Iliana Núñez en complicidad con algunos de sus más allegados, también maestros de esta disciplina, se ha encargado de "hacerle la vida de cuadritos" a quienes no son "santo de su devoción".

En el caso más reciente, sin motivo aparente la dirigente cesó de su cargo como coordinadora técnica de ese organismo a la maestra Laura Cinta.

De acuerdo a fuentes al interior de la AVG, a la hora de tomar esta decisión Iliana, como vil político, actuó bajo un régimen de autoritarismo, pues solo consultó a sus incondicionales, quienes con tal de seguir manteniendo ciertos privilegios, se prestaron para lo que a todas luces pinta como una injusticia.

Y es que, sin argumentos que justificaran su proceder y ante la sorpresa de sus propios aliados, Iliana Núñez dio las gracias a Laura Cinta, quien venía realizando un buen trabajo en este puesto.

Esta acción no ha pasado desapercibida para algunas entrenadoras de clubes afiliados a la Asociación Veracruzana de Gimnasia, quienes hicieron llegar su inconformidad a RASO y COLOCADO, ya que aseguran, no es justo que la dirigente apoyada por un grupo afín a ella, haga lo que le venga en gana.

Iliana Núñez no debe olvidar que si está en ese cargo es gracias a los clubes, por lo que lo menos que puede hacer es  corresponder de la misma forma y dejar a un lado tanto rencor.

El poder marea a la gente y en el caso de la también juez estatal está más que claro que necesita tomar de manera urgente un curso de "humildad" y de paso una cápsula de "ubicatex".

De lo contrario, la presidenta de la AVG seguirá "regándola" y lo que es peor, peleándose con medio mundo, pues llegará el momento en que hasta los que dicen ser sus incondicionales, le darán la espalda por la prepotencia y despotismo con qué suele  tratar a sus afiliados, según palabras de algunas entrenadoras.

Además que con sus actitudes revanchistas, en vez de ayudar al progreso de la gimnasia veracruzana, Iliana será una piedra en el camino para niñas y jóvenes que desean seguir desarrollándose en esta disciplina olímpica y desde luego, representar dignamente a su estado.

Iliana Núñez no tiene un historial muy bueno que digamos en la AVG, ya que en 2020 fue demandada junto con Adriana Núñez, por padres de familia que exigían a ambas rendir cuentas de los recursos que ingresaban por concepto de inscripciones y cuotas de participaciones en eventos.

En nuestra siguiente entrega ahondaremos más en el tema, pues aún hay mucha tela de dónde cortar.

Tiempo al tiempo.

Nos vemos SDQ.