Raso y Colocado

¿Quién manda realmente en la DIMUDE?

Es la pregunta que se hacen a diario los deportistas porteños, al ver como un empleado de menor rango llamado, Alberto Alemán Sánchez mueve todos los hilos en esta dependencia, sin que nadie, ni el mismo alcalde Amado Cruz lo meta en cintura, pese a que le quita autoridad a su primo, Ricardo Ordóñez, quien SE SUPONE ES EL JEFE. 

Nos hemos cansado de señalar en este espacio los desmanes del conocido también como “Beto Loco” en su papel dizque de COORDINADOR DE EVENTOS de ese organismo, incluso contra sus mismos compañeros de labores, a los que además de sobajar, se da el lujo de correr por no convenir a sus intereses.

Uno de ellos, su compadre PABLO ARRIOJA, a quien dicen, echó de la Alameda Deportiva por haberse pasado de “vivo” y no reportarle parte de las ganancias que obtiene por la renta de espacios a equipos infantiles de futbol que entrenan en campos de ese inmueble.

Alemán Sánchez se molestó tanto de la traición de su “casi hermano”, que por los “suyos”, sin consultar siquiera al director o sea a “Richard” Ordónez,  LO DESPIDIÓ COMO TRABAJADOR DE LA ALAMEDA.

Así se las gasta el que se dice también entrenador y presidente de liga, y lo peor del caso es que ni la máxima autoridad en este puerto, mucho menos el que dice ser SU JEFE INMEDIATO, le han puesto un correctivo para que no siga manchando la imagen de una dependencia que se supone fue creada para apoyar a los deportistas, no para enriquecerse.

Y es que así como pinta el panorama, pareciera que el Coordinador de eventos quiere “COMERSE EL PASTEL SOLITO”, pues si no se tentó el corazón para poner de patitas en la calle a su compadre, que más pueden esperar sus demás compañeros, a quienes a base de engaños ha logrado ponerlos de su lado para evitar que se les rebelen y le “tiendan la cama”.

Mucho cuidado deberán tener el subdirector Carlos Esquivel; el coordinador de baloncesto, Enrique Abad; el de futbol, Ember Baínas y compañía, para no correr la misma suerte que Arrioja.

La última de “Betito” Alemán, es que a pesar de haber recibido un carrito para podar por parte de una empresa que recoge plástico, a cambio de que todo el material que se recolecte en la Alameda se lo entreguen, no ha querido utilizarlo, pues se logró saber, el único que puede hacerlo es él y nadie más, y eso, cuando quiera.

Nos vemos SDQ.