Raso y Colocado

Es una vergüenza que a los 50 años y más, jugadores sigan comportándose como unos “chamacos”  dentro de la  cancha de futbol y se dejen llevar por sus instintos “cavernícolas” cada vez que no les parece una marcación del árbitro.

Y cierto, a veces los silbantes la “riegan” a la hora de sancionar tal o cual jugada sin ninguna mala intención, pues son seres humanos y están expuestos a cometer errores durante un partido.

Sin embargo, nada justifica las agresiones física o verbales de que son objeto por parte de futbolistas frustrados, que sintiéndose los sabelotodo de este deporte, se la pasan reclamándole todo el tiempo al árbitro.

En la jornada del pasado fin de semana, dos nazarenos fueron agredidos por “trogloditas” que no estuvieron de acuerdo en lo que marcaron.

Uno fue en el duelo entre Cruz Azul y Clotorec correspondiente a la categoría 60 años y más, mientras que el otro en el Bayern Coatza-Pajaritos de la 50 y Más.

En el primero, uno de los hermanos Trejo de nombre Antonio empujó al silbante, luego de que éste señalara una mano, que según él no era.

En el otro, el pseudofutbolista Jorge Luis Cruz del equipo Bayern Coatza golpeó al silbante, tras molestarse también por una marcación que consideró errónea.

En ambos casos, como era lógico, los árbitros optaron por suspender los partidos para cuidar su integridad física

Pero dijera el ya fallecido cantautor mexicano Juan Gabriel en una de sus melodías, “pero que necesidad, para que tanto problema...”, si se trata de un simple partido de futbol, en el que solo están de por medio dos puntos, no más.

No se entiende entonces la actitud violenta de algunos dizque jugadores dentro de la cancha. cuando el juez central se equivoca en una jugada o de plano la riega.

Y la verdad, dejan hasta con el ojo cuadrado a más de uno, cuando los jugadore se transforman en unos energúmenos, perdiendo el control sobre sí mismos y cometiendo locuras de las que luego se arrepienten, aunque a veces ya es muy tarde.

Pero lo más vergonzoso es que estos “papelones” sean protagonizados por jugadores veteranos mayores de 50 años, que se supone, cuentan con cierta madurez para controlar sus emociones y no dejarse llevar por la pasión de un partido.

Debería entender los veteranos que lo más importante para ellos a estas alturas de su vida, es que gracias a Dios aún pueden poder practicar su deporte favorito y convivir con los amigos dentro y fuera de una cancha.

Y sí, el resultado también importa, pero a su edad creemos, no debería ser una prioridad ganar siempre.

Claro, si se da que bueno y si no, no pasa absolutamente nada, pues pueden presumir de que por jugar futbol tienen salud, y eso no se compra ni siquiera ganando un título.

Bueno, es nuestro punto de vista, habrá quienes no estén de acuerdo y es respetable, pero lo que es del César al César. No hay más.

Ahora falta saber cuáles serán las sanciones para esos dos jugadores por parte de la liga, aunque la mayoría piensa que deben aplicarles un castigo ejemplar.

Eso que ni que.

PREPARAN FESTEJO

El que prepara su fiesta de aniversario es el club de deporte inclusivo Delfines de Coatzacoalcos.

El alto mando de esta organización, Miguel Angel Fernández con el apoyo de los padres de familia planean “tirar la casa por la ventana”, y no es para menos, cumplirán seis años promoviendo el basquetbol, futbol y atletismo entre niños con capacidades diferentes, especialmente Síndrome de Down.

Por el momento ya tienen el salón en donde celebrarán su magno evento, solo falta afinar pequeños detalles para que todo esté listo.

Y aunque la fecha no la dan a conocer todavía, será a mediados del mes de febrero con la presencia de distinguidos invitados cuando se realice el festejo.

Felicidades.

Hasta la próxima SDQ.