Crónicas del Poder: Agua Dulce: Transformación real

• La búsqueda del bienestar colectivo
• La política es servicio, no negocio, dice Noé Castillo Olvera
• Sociabilizar las obra pública
• El maestro lleva mano en la sucesión

"Reelección...reelección", fue un grito que se escuchó el martes por la tarde durante un momento del tercer informe de gobierno del alcalde de Agua Dulce, José Noé Castillo Olvera, realizado en el domo del Parque Venustiano Carranza.

El profesor el recuento de su administración y gestión en un acto que no solo sirvió para rendir cuentas, sino también para reafirmar su postura ideológica sobre el quehacer público.

En dos intervenciones de no más de cinco minutos y un video que tuvo la duración de 45 minutos presentó todos los logros de su gobierno que abarcan entre otras cosas más de 100 obras realizadas.

Un video que por cierto no se perdió en la demagogia y mostró el antes y después de la obra realizada el costo y el beneficio a los ciudadanos de la zona.

En este sentido, el Maestro, quien asegura que no existe ningún documento que lo ligue con los partidos conservadores, y que siempre ha formado parte de la izquierda, realizó gestiones nunca antes vistas en la ciudad, ante Pemex y diferentes niveles de gobierno, para que su presupuesto no se quedará corto en la edificación de obras.

Y es que el alcalde hidrómilo ha entendido que no sólo basta con realizar la obra, si no hay que sociabilizarla, admitir y dar razón a la población que pueda sufrir una incomodidad durante su construcción, pero que al final del día el beneficio será mayor.

En un discurso que combinó balance, agradecimiento y visión de futuro, Castillo Olvera delineó los principios que, según él, deben guiar a un gobierno comprometido con el bienestar colectivo.

Caminó tranquilo en su discurso conocedor de qué la tarea estaba cumplida en estos primeros tres años.

Durante su primera intervención, el alcalde enfatizó los logros alcanzados en sus tres años de gestión.

Subrayó que el trabajo en equipo ha sido la piedra angular de su administración, destacando mejoras en servicios públicos, salud, educación, turismo y desarrollo económico.

LA IMPORTANCIA DE LA TRANSFORMACIÓN REAL

En palabras del propio Castillo: "Nuestro deber como servidores públicos ha sido claro desde el inicio: trabajar juntos para construir una ciudad más justa y equitativa para todos". Estas palabras resuenan como un eco del ideal de una gobernanza incluyente, un pilar fundamental en su mensaje.

Uno de los puntos más notables fue su referencia al concepto de "transformación real", una frase que utilizó reiteradamente para describir los avances logrados.

 Este énfasis en la transformación refleja una narrativa política que busca conectar con un electorado que demanda cambios tangibles en su calidad de vida.

En un contexto de crisis económica global y tensiones sociales, las palabras de Castillo parecen diseñadas para proyectar confianza y esperanza.

LA POLÍTICA ES SERVICIO, NO NEGOCIO

La segunda parte de su discurso marcó un giro hacia un enfoque más reflexivo y filosófico.

Castillo hizo un llamado a la unidad y al trabajo conjunto, invitando a los diferentes sectores sociales y económicos a sumar esfuerzos. "Siempre he creído que la política es servicio, no negocio", declaró, una afirmación que resonó con fuerza en un país donde la corrupción es una preocupación constante.

En este sentido, su discurso también estuvo impregnado de un fuerte apoyo a las políticas federales y estatales, mencionando con entusiasmo el respaldo de la presidenta Claudia Sheinbaum y la gobernadora veracruzana Rocío Nahle.

Esta alineación política no solo refuerza su base, sino que también lo posiciona como un actor clave en la red de liderazgos regionales que buscan consolidar el proyecto de transformación a nivel nacional.

Sin embargo, el mensaje de Castillo no estuvo exento de retos. Reconoció que aún hay mucho por hacer, especialmente en materia de infraestructura y combate a la desigualdad.

En un tono que alternó entre la autocrítica y la visión, aseguró que su gobierno seguirá trabajando "con la misma pasión y compromiso" para lograr un Agua Dulce más próspero y digno.

El acto también sirvió para delinear cómo concibe Castillo Olvera el futuro de su municipio.

Habló de fortalecer la unidad y de enfrentar los retos con imaginación y responsabilidad ambiental.

Este último punto es particularmente relevante en una región que enfrenta los efectos del cambio climático y la necesidad de diversificar su economía.

En su conclusión, el alcalde reiteró su compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas, dos valores que calificó como fundamentales para la gobernanza.

LLEVA MANO EN LA SUCESIÓN

El tercer informe de gobierno de José Noé Castillo Olvera no solo fue un ejercicio de rendición de cuentas, sino también una plataforma para reafirmar los principios que guían su administración.

En un escenario político donde la confianza en las instituciones es frágil, discursos como el suyo tienen el potencial de fortalecer el tejido social y político, siempre y cuando vayan acompañados de resultados palpables.

Para Agua Dulce, el reto está claro: mantener la unidad y avanzar hacia un modelo de desarrollo que sea incluyente, sostenible y justo. La administración de Castillo Olvera tiene aún un camino por recorrer y fortalecer más la confianza de los habitantes en su gobierno, que, sin duda, se traducirá en sostenibilidad de sus proyectos políticos personales.

Y aquí, por lo hecho, a pesar de qué otros anden buscando apoyo fuera del municipio, Noé Castillo Olvera lleva mano en la sucesión.

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