CineSillita

Después un largo recorrido llegamos al lugar esperado, la función ya había empezado, pero a pesar de ello mi amiga Carmen y yo nos acomodamos para poder disfrutar de la película y de unas ricas palomitas que nos obsequiaron.

Una gran tela blanca sobre la pared, era la pantalla de la cual se podían observar las hermosas tomas fotografías del largometraje que se proyectaba y del cual diversas familias estaban disfrutando en ese espacio libre, cerca del parque de la colonia Constituyentes, en ese primer viernes del mes de julio.

Así, esa tarde noche era muy fresca, contraria al calor del medio día. Se podía vislumbrar unos relámpagos que cortaban la noche, pero la amenaza de lluvia aún no se presentaría.

La película proseguía, pero pudimos saludar a Rubí Oseguera y David Aguirre, coordinadores del proyecto “Cine Sillita”, el cual consiste en llevar a cabo jornadas de proyecciones de cine que se realizan una vez a la semana en espacios públicos, promoviendo de esta forma el esparcimiento, el uso recreativo del tiempo libre, la convivencia entre participantes y su colaboración, y que los asistentes, lleven su propia silla.

Se trata de disfrutar diferentes tipos de:proyecciones, a través de la propuesta de películas del cine de oro mexicano, así como largometrajes ganadores de premios.

Cabe destacar que, “Cine Sillita”, es un programa de la Dirección de Vinculación Cultural que opera la Dirección de Animación Cultural de la Secretaría de Cultura en colaboración con la Dirección de Cultura del H. Ayuntamiento, siendo Coatzacoalcos una de las 40 sedes que existen a nivel nacional.

De esta manera Oseguera y Aguirre, llevan también esté programa al otro lado del río, llevando su equipo de cine al parque Benito Juárez de Villa Allende, los días jueves de 18 a 20:00 Hrs, y los viernes se traslada al centro de Desarrollo Comunitario, de la Colonia Constituyentes, con el mismo horario.

A esta colonia, como mencioné anteriormente, llegué y me gusto ver el espacio libre que tienen para la comunidad, y que gracias a la gestión de los coordinadores se logró que estuviera sin monte, no se podían evitar uno que otro mosquito, pero nos permitían poder ver una hermosa película bajo la luna.

Ya avanzada la película, un niño se acercó, desde un gran triciclo se quedó viendo la peli. A él se le acercó un muchacho llevando una carretilla, dentro estaba una niña. El chico se acomodó dentro de la carretilla junto a la niña, y así los tres disfrutaban de esa proyección de niños buscando tesoros.

Mi amiga Carmen y yo nos acabamos las palomitas, la peli también llegó a su fin. Las familias se empezaron a dispersar. A lo lejos se veían unos niños jugando en el parque, y más allá se podía ver una barda pintada.

Tanto espacio para hacer tantos proyectos, pensé. Pero esa noche del viernes de palomitas y de “Cine Sillita”, había llegado a su fin, y esperaríamos hasta la próxima semana. Por lo pronto, yo me quedaba con la hermosa imagen de tres niños viendo una peli y como butaca sentados en un triciclo y una carretilla, en una tarde noche de verano.