El dirigente nacional de la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM), Rodolfo González Guzmán, reconoció que se avanza con “pasos cortos”, pues si bien se ha registrado un aumento en los salarios, la inflación no permite que se vean reflejado los beneficios.
En su reciente visita a Coatzacoalcos, comentó que el aumento del salario mínimo depende del gobierno federal, a quien también le compete controlar los precios en los servicios básicos, como el gas o la energía eléctrica.
“El salario ha recuperado su poder de compra, traíamos un rezago del 78 por ciento en los salarios mínimos, y en los últimos años se ha ido recuperando, sin embargo, nos ha afectado mucho la inflación y se la está comiendo a estos beneficios que se han logrado con mucho esfuerzo”,
Otra de las mejoras para la clase obrera, fue la eliminación del outsourcing, figura que precarizaba las condiciones de la clase trabajadora, porque no les permitía acceder a contar seguridad social y otras prestaciones de ley.
En todo el país son más de 850 mil agremiados que tiene la CROM en diferentes sectores.
Finalmente descartó que la CROM haya perdido fuerza, aun con la aparición de nuevos gremios sindicales.
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