Agua Dulce | 2024-08-22
La conmoción y el dolor persiste en el corazón de Doña Leticia de los Santos, quien sigue enfrentando el desgarrador proceso del feminicidio de su hija, Juana Ovando, una activista que marchaba contra los feminicidios.
El asesinato de Juana, ocurrido el 22 de abril de 2022 a manos del profesor de primaria, identificado como 'Serger N', se ha convertido en una ´herida abierta´ que no deja de dolerle a su madre.
A pesar del tiempo transcurrido, el caso sigue inmerso en la incertidumbre legal y la desesperanza debido a la lenta marcha del sistema judicial.
Como se recordará, la tragedia ocurrió cuando el profesor 'Serger N' presuntamente habría apuñalado y asfixiado a Juana, un acto que aún lamentan a quienes conocieron a la joven de 21 años.
Sin embargo, el proceso judicial, no avanza con la rapidez que la familia de Juana esperaba, las audiencias se han pospuesto repetidamente, lo que ha generado un temor a doña Leticia de que el culpable pueda recuperar su libertad y que la muerte de su hija quede sin el castigo que merece.
Durante estos dos años, el dolor de perder a su hija ha sido incesante para su madre; el impacto emocional ha sido tan profundo que incluso hubo momentos en los que se vio obligada a quedarse en casa, sin embargo, a pesar de su sufrimiento, ha encontrado la fuerza para seguir adelante, motivada por sus otros dos hijos y un nieto.
Recientemente, doña Leticia tuvo un sueño donde percibió que su hija estaba contenta, sin embargo no pudo verla, un pequeño consuelo en medio de la ´tormenta´.
En un llamado desesperado, con voz quebrada por el dolor que le causa el recuerdo del asesinato de su hija, pidió a las autoridades procuradoras de justicia, que atienda el caso de su Juana Ovando para que el culpable reciba el castigo que corresponde.
La impunidad no solo prolonga el sufrimiento de la madre, sino que también mantiene la falta de justicia en los casos de feminicidio que siguen sin resolverse.