Fuego consumió más de 100 hectáreas en Ixhuatlán del Sureste; campesinos no recibieron apoyo | VIDEO

Monos arañas, pericos, iguanas, tortugas y otras especies quedaron calcinadas.

Ixhuatlán del Sureste | 2024-05-21

Más de cien hectáreas de la reserva ecológica del ejido Limón, del municipio de Ixhuatlán del Sureste, fueron consumidas por el fuego, los ejidatarios, campesinos, de tres ejidos, se sumaron a las labores para rescatar la flora y fauna que por más de 15 años protegieron. Desafortunadamente, la falta de apoyo de protección civil y pipas, fueron las causas de la mortandad de varias especies, entre ellas cotorros, Pericos, monos, arañas, culebras, tortugas, iguanas, etc. 

Para llegar al lugar denominado como la reserva ecológica, se tiene que caminar más de un kilómetro, por fortuna nuestro guía fue equipado con machete en mano y agua para hidratarnos durante el recorrido, Diario del Istmo obtuvo evidencias de la afectación causada al medio ambiente, por la negligencia de algunas dependencias. 

Isau Rodríguez Merales, representante de la Asociación de Productores Ecologistas Tatexco, (APETAC) de Ixhuatlán del Sureste, dijo, "El fuego inició la noche del jueves, generando la movilización de los pobladores de los ejidos Limón, Nanchita y Zapotal, los cuales se han encargado de cuidar, preservar y proteger este pequeño pulmón del municipio, desafortunadamente el fuego no rebasó porque las manos hombres fueron insuficientes para crear guardarrayas, acarrear agua y ayudar a las especies que sufrieron quemaduras". 

Agregando, Este terreno tiene colindancia con los ríos San Antonio y Coatzacoalcos, por lo que la flora y fauna se mantenía en condiciones para la reproducción de las aves, reptiles, anfibios, ranas, peces, monos araña, entre otras más que tuvieron que buscar la noche del jueves un área segura para evitar que el fuego los calcinara.

Entre la flora que fue devastada se encuentran árboles como Marota, Bari, Dormilón, Baraprieta, Rabolagarto y Acastle, las diferentes especies de palmeras que tardaron más de 15 años en alcanzar la altura ideal, que con el fuego fueron derribadas y convertidas en cenizas.

Se sumaron a la tarea que duró 48 horas

Pobladores de los ejidos  Limón, Coyolar, Nanchita, fungieron como bomberos o elementos de protección civil, apoyándose de tinacos, tambos, mangueras, bombas y camionetas para sofocar el siniestro, que controlaron luego de 48 horas, aunque solicitaron la ayuda, el personal de protección civil municipal acudió a tomarse la foto sin intervenir.

En entrevista realizada al representante de APETAC, explicó

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