Acayucan, Ver. | 2024-01-31
Con una discapacidad de nacimiento, Abraham Eugenio Trinidad cumplirá en este 2024, 24 años al frente de un volante dando el servicio público de taxi en Acayucan, San Juan Evangelista y Sayula de Alemán.
Conocido popularmente como "Tingo", el también radio aficionado de banda civil, originario de Sayula de Alemán, adaptó a una de sus piernas, una extensión de madera con el cual opera el clutch y el freno, y con uno de sus brazos y un bastón, el acelerador, sin que hasta la fecha, haya tenido a sus 61 años de edad, un accidente que haya provocado por esa enfermedad.
Abraham Eugenio, tiene licencia oficial tipo A para el transporte de pasajeros o servicio dentro de ese sector.
En la región de Acayucan es sumamente conocido por su labor, y el servicio que presta no ha tenido queja alguna ante la delegación de Transporte público además de que su discapacidad, no ha sido un impedimento para poder laborar al frente de un volante de auto.
Gracias a su hermano Adan, uno de los doce que tuvieron sus padres en Sayula de Alemán, se animó a aprender la labor de chofer. Su consanguíneo fue durante muchos años, operador de trailer y lo animó a superarse de esa manera.
De esa forma, el Tingo empezó el oficio de chofer de taxi. Le fue rechazado la autorización para la obtención de la licencia tipo B, que le permitiría conducir unidades pesadas y operar trailers como su hermano Adán.
De los doce hermanos que eran, solo El fue quien nació con una discapacidad en ambas piernas, las cuales están reducidas a un 50 por ciento, lo que lo obliga a usar muletas para andar y al conducir, ocupa una extensión de madera lograrlo.
El Tingo es casado con Luisa Ambrosio Hernández, con la cual procreó dos hijos, un varón que actualmente es también ruletero y una mujer que hoy en día es ama de casa.
En Sayula de Alemán, seria el único ruletero con esa condición física. Hay otro en Acayucan, que afirma el entrevistado, "No se muestra".
La discapacidad dijo, no debe ser un factor para no buscar la superación y poder valerse por si mismo.
Aunque lleva más de 20 años en el oficio, Abraham Eugenio no cuenta con placas de taxi propias y la Secretaría del bienestar, lo tiene inscrito como beneficiario de la pensión universal para personas con discapacidad.