Cosoleacaque | 2023-12-26
"No se lo deseo a nadie es muy doloroso", dice Justo Alberto Balcázar Domínguez mientras sus compañeros de la marina le dan abrazos y palabras de consuelo.
La tragedia llegó a la familia Balcázar Valerio en vísperas de la navidad, un accidente carretero le cambió la vida en segundos.
Balcázar Domínguez sepultó a su esposa y a su pequeña de 6 años y en medio del dolor reza por su primera hija que está hospitalizada.
El 22 de diciembre la familia asistió a una boda, esa noche decidieron descansar y al día siguiente, el 23 muy de mañana regresaban a casa, debido a deberían llegar a Cosoleacaque para preparar los últimos detalles y festejar los XV años de Ariane Yanary, su hija mayor que hoy lucha por su vida en una cama de hospital.
Toda la familia y amigos estaban invitados este 24 de diciembre a la fiesta de la quinceñera. Pero la vida les cambio en segundos.
De acuerdo a los informes periciales, el accidente automovilístico fue este sabado por la mañana a las 7:25 horas en la carreteras 185 Transístmica y Costera del Golfo, a la altura del puente libramiento.
Un autobús de la línea Sur con número 6634 que se dirigía a Coatzacoalcos embistió al Ford Fiesta donde viajaba la familia, el conductor de transporte al ver la tragedia huyó del lugar.
Ariadna, iba de copiloto, quedó prensada y murió en la escena. Yarenzi de 6 años falleció en el trayecto al hospital. Ariana de 15 años fue trasladada grave, mientras que Justo, el jefe de la familia, fue llevado por los elementos de la fiscalía a rendir la declaración de los hechos.
Fue así, que tras horas de trámites con la fiscalía y la funeraria los cuerpos llegaron en féretros a una vivienda de la colonia José F Gutiérrez, esa noche la celebración de los XV años se convirtió en velorio.
Ariadna y Yeretzi, madre e hija, fueron veladas esa noche de navidad, ese día también habían planeado los XV años de la hija mayor.
En la casa de la familia Balcázar Valerio las oraciones eran elevabas al cielo por los hermanos católicos, quienes en sus plegarias invitaban al niño Dios para confortar el corazón de la familia.
La tragedia consternó a los habitantes de Cosoleacaque, pero más a los amigos, colegas y vecinos de la familia que les acompañaron toda la noche, y recordaban a Ariadna, como una buena esposa, madre e hija.
"Una persona que siempre ayudo a su prójimo, a sus amigos, pero quien amó profundamente a su familia y fue inmensamente feliz, muy amada por su esposo y muy bendecida", expresa una de sus amigas que aún no da crédito a lo sucedido.
Este domingo 25 de diciembre, cientos de habitantes se reunieron en la capilla San Miguel Arcángel, el ministro Rumualdo Francisco ofició la misa de cuerpo presente.
"En esta navidad mucha gente está con sus fiestas preocupados, pero a mucha gente también le está pasando una tragedia, hay que encomendarnos siempre a Dios en todo momento, porque no sabemos qué día viene el Señor por nosotros", expresó el ministro de la capilla católica.
Rumualdo afirma que la preparación espiritual en esta tierra es importante para cuando Cristo venga, por qué la vida que tenemos depende de Dios, "hay otra hija que está hospitalizada, primeramente Dios que le dé la sanación de su cuerpo...es muy triste ver todo esto en esta colonia que son muy creyentes, hoy nos sentimos tristes todos", expresó el ministro, y agregó que la iglesia estará orando por la familia.
De la capilla San Miguel de Arcángel se dirigieron al panteón municipal de Cosoleacaque, allí fueron sepultadas juntas madre e hija.
Victor González, amigo de los deudos, a nombre de la familia dirigió unas palabras de aliento, y entre flores, cánticos y aplausos los ataúdes bajaron a la tumba.
"Fue una amiga, una buena madre. Son fechas muy importantes y hoy para nosotros días muy tristes...abracen a sus hijos, a su esposa, abracen a sus madres, a sus papás...Mucha fortaleza para la familia, para chuy, para su mamá de Ari, realmente duele, hay cosas que a veces no valoramos...", dijo Victor González.
La maestra de la escuela de Yaretzi dio el último pase de lista, a quien recuerdan cómo una niña llena de vida y deportista.
"Balcázar Valerio Yaretzi Monserrat", repitió tres veces la profesora y todos contestaron "presente", luego de un último aplauso a la pequeña, soltaron globos blancos que se elevaron en los cielos.
Por último, Justo Alberto, fue acobijado por sus amigos y compañeros de la Marina, de esta manera le mostraron su apoyo al teniente.
"Quienes conocen a Justo Alberto saben que es un buen hombre, trabajador, correcto, buen padre, amo a su esposa Ariadna, lo más importarte para él es y será siempre su familia", expresa uno de sus amigos.
Otros más comentan "De joven a Justo no le tocó fácil, pero con el apoyo de su hermana y su padre salió adelante, y se convirtió en un buen hombre haciendo honor a su nombre, justo y noble, nosotros oramos por él y su hija mayor, que primero Dios pronto estará recuperada en casa".
Las palabras de aliento y esperanza desfilan para los dolientes, "Las heridas del cuerpo sanaran, y el dolor del alma llevará más tiempo, pero esperanza hay para los que creen en Dios y en la resurrección", la familia tiene fe católica y cree que cuando Cristo venga por segunda vez volverán a estar juntos pero ahora por la eternidad.
Así mismo, el INEGI reportó que durante el 2022 hubo casi mil accidentes diarios. En cuanto al total de víctimas, se registraron 5 mil 181 personas muertas y 91 mil 501 lesionados, lo que representa casi 12 muertes y 250 personas lesionadas al día.
De acuerdo con el Secretariado Técnico del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes, en México los accidentes de tránsito se encuentran entre las 10 principales causas de muerte. En 2016 fallecieron 16,185 personas por esta causa. Con ello se calcula una tasa de 13.2 muertos por cada 100 mil habitantes.
Las estadísticas a octubre de 2022 reflejan que ocurrieron 1 mil 141 muertes al mes en siniestros viales, un promedio de 38 al día. Se trata de un aumento de accidentes mortales de hasta el 40% en comparación con hace siete años.