Agua Dulce | 2024-02-02
En dos puntos de la carretera interestatal Coatzacoalcos–Villahermosa, se sigue realizando sin freno, ni sanciones el tráfico y venta de animales protegidos por leyes federales.
A plena luz del día, justo en el punto de incorporación de vehículos provenientes de Tabasco a los carriles que conducen a Coatzacoalcos, estos cazadores furtivos, en grupos de hasta cinco o siete personas, instalan el 'mercado negro' y sin temor a que sean visto por las autoridades federales.
En su oferta, incluyen pequeños pericos, mantenidos en condiciones precarias, atados a ramas y expuestos a altas temperaturas y deshidratación.
Además, ofrecen especies protegidas como cocodrilos, guacamayas y serpientes, las cuales son transportadas en cajas de cartón, distribuyéndolas en distintos puntos donde estos traficantes han establecido como 'puntos de venta' en la Costera del Golfo.
A pesar de la presencia constante de oficiales de la Guardia Nacional división Caminos, Ejército Mexicano, Secretaría de Marina, policía estatal, la comercialización de estas especies protegidas continúa sin ser detenida, evidenciando una falta de acción por parte de las autoridades.