Miles de turistas se vacunaron; se desata polémica en Florida

Estados Unidos | 2021-01-31 | Agencias

Más de 53 mil personas, muchas de ellas turistas, consiguieron vacunarse contra covid-19 en el estado de Florida antes de que las autoridades establecieran como requisito que los interesados demuestren ser residentes.

Con la modificación, los turistas que se aplicaron la primera dosis de la vacuna perdieron la posibilidad de recibir la segunda.

La lista oficial de vacunaciones de Florida señaló el viernes que se han vacunado 52,385 personas de fuera del estado y 1,303 de condado “desconocido”.

No hay ningún dato oficial sobre cuántos son extranjeros y cuántos estadunidenses.

El gobernador Ron DeSantis estableció el 4 de enero un criterio de que, junto a los trabajadores de la Salud y empleados de asilos, se debería vacunar a los mayores de 65 años gratuitamente.

Desde India algunas agencias de viajes promocionaron “emocionantes paquetes de turismo de vacunas”, como definió la agencia Gems Tours and Travel.

Esa misma semana, la conductora argentina de televisión, Yani Latorre, presumió en Instagram que había traído desde Argentina a su madre para que se vacunara gratis. (https://www.instagram.com/p/CJwj5f0rBMb/)

Para entonces se había corrido la voz de que también turistas mexicanos, colombianos, argentinos y brasileños, entre otras nacionalidades, volaban a Miami, se hospedaban, rentaban vehículos y simplemente llegaban a formarse para recibir la primera dosis de la vacuna.

Las quejas de residentes de la Florida aumentaron a medida que los turistas adquirían miles de vacunas.

Finalmente, el gobierno decidió el miércoles que quienes pidieran vacunas y fueran mayores de 65 años tienen que ser residentes.

La nueva regla impide que quienes se hayan vacunado como turistas desde el 7 de enero pierdan la posibilidad de tener la segunda dosis, necesaria para que la vacuna tenga efecto contra el SARS-Cov-2 que causa covid-19.

Uno de esos turistas es el conductor mexicano Juan José Orijel.

RIGE LA VULNERABILIDAD

El orden en que se suministran las vacunas contra covid-19 en Estados Unidos obedece a una jerarquía de vulnerabilidad y principios éticos.

Las primeras vacunas que se aplican este mes son para el sector salud, especialmente para los que combaten directamente la pandemia, y para los empleados y residentes de asilos de ancianos.

El Centro para el Control de las Enfermedades (CDC) establece fases y esos dos grupos integran la 1a.

La siguiente (1b) es “para los trabajadores esenciales de primera línea”, entre ellos los bomberos, policías, trabajadores agrícolas y de alimentos, empleados del Servicio Postal, de fabricación, trabajadores de supermercados y de transporte público, además de mayores de 75 años.

La 1c es para las personas de entre 65 y 74 años de edad, y de entre 16 y 64 años que padecen comorbilidades.

Los principios éticos que estableció son maximizar los beneficios y minimizar los daños, mitigar la inequidad en la salud y promover la justicia, así como la transparencia.